Docentes que ayudan a construir la sociedad del mañana

La educación es uno de los elementos fundamentales de nuestro avance como persona y como sociedad. De ella depende la construcción de nuestras personalidades y, por extensión, de nuestro papel en el grupo. La educación define lo que somos capaces de aportar para que mañana el mundo sea mejor que hoy. Y esto no sería posible sin los docentes.

La docencia es una responsabilidad a la vez que una oportunidad. Los docentes tienen en sus manos el poder de moldear la sociedad del futuro. Cada 5 de octubre se celebra el Día Mundial de los Docentes con el objetivo de recordar que son piezas claves en todo el mundo. Y para poner en valor su labor dentro del aula.

Un docente es referente y una fuente de valores para sus alumnos. De ellos depende mucho más que la transmisión de conocimientos entre generaciones (algo fundamental también, todo sea dicho). Los docentes con sus actos marcan los de quienes aprenden de él algo más que la tabla de multiplicar o el estilo literario de una época histórica. Los docentes enseñan, además, a pensar, a compartir, a escuchar y conciliar y a enfrentarnos a determinadas circunstancias de nuestras vidas, por ejemplo. También son ejemplo de que las cosas pueden hacerse de otra forma siempre. Y lo demuestran con pequeños gestos e iniciativas que se salen de lo normal dentro del aula.

Un ejemplo es José Pujol, profesor en un instituto sevillano que ha puesto en marcha un innovador sistema de enseñanza de robótica y programación. Las clases teóricas no existen, sino que los alumnos aprenden desarrollando proyectos. Una manera de demostrar que la implicación del alumnado depende, en cierto grado, de la estimulación del profesor.

De igual manera fomenta la participación y la implicación de una profesora de un instituto de la localidad malagueña de Cártama. Reconocida en el Certamen D+I como una de las docentes más innovadoras de España, las nuevas tecnologías son sus aliadas. Tabletas, móviles y apps son algunas de sus herramientas de trabajo para elevar el índice de participación de los alumnos. También apuesta por la enseñanza con el método invertido: los alumnos ven en casa un vídeo con una nueva lección y después trabajan en casa sobre ello.

¿Y la ciencia ficción como recurso educativo? Un profesor de la Universidad de Jaén apuesta por ella para enseñar Física a través de una novela. ‘Boomerang Rojo’, que es como se llama, se presenta como complemento didáctico para estudiantes de Ingeniería, por ejemplo.

La educación en valores es también el objetivo del proyecto de un profesor de la localidad cordobesa de Bélmez. Desde hace unos años el alumnado está implicado en la construcción de una vía verde en un antiguo trazado ferroviario. La conservación del patrimonio y el respeto al medio ambiente son los dos grandes objetivos de una iniciativa a la que más tarde se unieron habitantes de la localidad.

Estas son solo cuatro de las miles de iniciativas nacidas de la pasión de los docentes por su trabajo. Propuestas concebidas como oportunidades para implicar a los estudiantes en la construcción de la sociedad del mañana. Y de paso ejemplos de lo fundamental que son los docentes para ello.