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El PSOE se desmarca de Aguayo y niega responsabilidad política en los ERE de los dos ex consejeros de empleo

Aguayo considera que Viera y Fernández tienen "responsabilidad política, sin duda", en el caso de los ERE

Charo Solís / Charo Solís/ Europa Press

El secretario de Organización del PSOE, Juan Cornejo, tuvo que asumir esta mañana el papel de zapador para intentar desactivar la frase lanzada por la consejera de Hacienda, Carmen Martínez Aguayo: si hay responsabilidades políticas en el escándalo de los ERE, “sin duda”, estas recaen en los ex consejeros de Empleo José Antonio Viera y Antonio Fernández.

La postura de la consejera choca frontalmente con la mantenida hasta ahora por el partido: el guión de la comisión de investigación, que no tiene más protagonista que el ex director general de Empleo Francisco Javier Guerrero. Y el PSOE sigue enrocado ahí.

Cornejo aseguró que el partido sigue en esa clave, desmarcándose así de Aguayo, que no tiene ningún cargo orgánico. “El PSOE-A tiene una posición que es la que fue fijada en la comisión de investigación, con independencia de si se producen modificaciones o avances en las investigaciones y se tuviesen que adoptar nuevas responsabilidades así lo haría”, zanjó.

La frase de Aguayo es una carga de profundidad, porque la ha pronunciado 48 horas después de la comparecencia a petición propia en el Parlamento del presidente andaluz. Esta es la declaración que habría cabido oír a Griñán, que se limitó a seguir el mismo esquema de defensa que utilizó hace seis meses durante su interrogatorio sin aportar nada distinto. Pero hay otro elemento que da más peso a sus declaraciones: se alinea con las conclusiones que puso sobre la mesa IU para cerrar esa comisión de investigación en el Parlamento sobre este escándalo.

En estas parecieron estar de acuerdo inicialmente los dos socios de gobierno. Había que señalar como responsables políticos a Viera y Fernández, pero en el último minuto los socialistas se echaron atrás. El resultado: la comisión de investigación se cerró en falso. Sin dictamen porque los partidos no lograron consensuar sus conclusiones. IU quería señalar a Fernández, Viera, al viceconsejero Agustín Barberá, y a Guerrero. El PSOE sólo a este último. Y el PP a todos y colocar en la parte más alta del organigrama a Griñán y su antecesor, Manuel Chaves. Pero si no tenía el todo, no quería dar un sí a una parte (por eso ni siquiera apoyó a IU, lo que le valió el reproche de la coalición en el pleno del miércoles).

Así el documento de 1.000 folios que recogerá el contenido de esa comisión no tiene un final. Tiene tres. Pero IU sí se congratula de que, aunque no conste por escrito, Aguayo le venga a “dar la razón” ahora. Aunque no le sorprende del todo. “A estas alturas, la responsabilidad política de Viera en este caso es evidente”, aseguró el portavoz de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) en el Congreso y diputado por Sevilla, José Luis Centella. De todas formas, en IU creen que puede haber todavía más. El parlamentario que fuera presidente de la comisión de investigación, Ignacio García, entiende que queda “mucho terreno en el ámbito de asumir responsabilidades políticas y mucho terreno en el conocimiento de la verdad y el seguimiento del dinero”.

Al PP este choque entre Aguayo y el PSOE le viene más que bien para intentar pasar página de la desafortunada intervención del jueves en el Parlamento de su líder, Juan Ignacio Zoido. Habló de nuevos intrusos, con nombres y apellidos, y que luego fueron corregidos por su propio partido, y habló de dos ayudas “irregulares”, que fueron desmentidas por la Junta.

Para el PP, la rectificación de Aguayo “a su jefe” es una prueba del “nerviosismo extremo” de los socialistas. “Vuelve a cambiar su tesis, ya que en sus conclusiones de la comisión de investigación dejó su nivel de responsabilidad política en Guerrero, y ahora la eleva a Viera y Fernández cuando siempre los han protegido”, dijo la vicesecretaria de Territorio, Medio Ambiente y Asuntos Europeos del PP-A, Alicia Martínez, que recordó que es la “segunda vez” que la consejera corrige a Griñán, después de que a finales del año pasado le corrigiera en la cifra del déficit.

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