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El socialismo se garantiza el control del Consejo de la Juventud de Andalucía

Grupo de trabajo del CJA.

Olga Granado

Una única candidatura compite para la renovación del Consejo de la Juventud de Andalucía (CJA) en una asamblea prevista este domingo en Torremolinos (Málaga) tras dos intentos fallidos el último año, en el que se han frustrado las expectativas de otras listas en las que, por primera vez en la historia del órgano, no había miembros de Juventudes Socialistas de Andalucía (JSA).

En la que se somete a votación este 23 de abril sí está JSA y representantes de entidades vinculadas en mayor o menor medida con el PSOE, lo que ha despertado duras críticas por parte de otros colectivos que apuntan a “maniobras” para hurtar independencia en el que es el principal órgano de participación de los jóvenes en Andalucía. Colectivos como las Juventudes Comunistas, Foro Joven, Juventudes Andalucistas o AUNA, que estaban en las candidaturas de las dos asambleas abortadas el último año, hablan de una lista hecha para que el CJA “esté controlado por JSA y satélites del PSOE”, lo que ven especialmente grave en un momento en que se aborda la nueva Ley de Juventud y se hace más necesario un contrapeso.

Pero ¿por qué? ¿cuáles son los nombres de la candidatura que tantos recelos despiertan y su relación con el PSOE? La lista en cuestión está integrada por Miguel Ángel Romero como candidato a presidente; Estefanía Ortiz y David García, para vicepresidente primero y segundo, respectivamente; y Azahara Cabrera, Óscar Algandour y María Carranza, como vocales, con lo que se completarían los seis miembros de la comisión permanente, o lo que es lo mismo, la dirección del CJA. Veamos quiénes son cada uno de ellos.

Empecemos por David García. Es de la sección juvenil de UPTA (Unión Profesional de Trabajadores Autónomos). Independientemente de que sea familia de cargos del PSOE y amigo íntimo del director del IAJ, Francisco Tomás Pizarro, cuyas “injerencias” en el CJA denuncian los críticos, sólo hay que mirar su perfil de Twitter para saber cómo está volcado con la red de apoyo a Susana Díaz en su campaña para las primarias del partido, con el que colabora en su pueblo, Cantillana (Sevilla):

Mientras, de Azahara Cabrera no hay ninguna duda porque es la representante de JSA, que por primera vez en las candidaturas que se presentaron en las asambleas de mayo y julio de 2016, y cuyos resultados no fueron aceptados por el IAJ, se iba a quedar fuera de la comisión permanente.

Por su parte, María Carranza, es miembro de Surgente. Se trata de la sección juvenil de UGT, sindicato tradicionalmente vinculado con el PSOE. Ella no duda en mostrar su afinidad en su perfil de Facebook con los socialistas de su pueblo, Peñaflor (Córdoba).

Por su parte, Óscar Algandour es el miembro que entraría por E-Veleta, la asociación que organiza el Salón Internacional del Cómic de Granada y dirigida por Alejandro Casasola, quien se define como “socialista”, si bien en su caso no es de los susanistas, sino que simpatiza con Pedro Sánchez para las primarias del PSOE.

Uno de los guiños que le hizo el PSOE fue incluir en su programa electoral para las elecciones municipales la creación del Centro Andaluz de la Historieta, pero ganaron los populares el Ayuntamiento de Granada. En realidad, las relaciones del PSOE de Granada y las referidas Surgente y E-Veleta no son ningún secreto. Valga este ejemplo como cierre:

Finalmente, Miguel Ángel Romero y Estefanía Ortiz llegan en representación de Inserta y Andalucía Diversidad LGTB, respectivamente, dos de las asociaciones que han aumentado el censo del CJA el último año con el proceso de renovación en marcha, lo que formaciones como Podemos han calificado directamente de “trampa”. El Instituto Andaluz de la Juventud (IAJ) justificó el incremento del censo para la asamblea por la nueva exigencia de que las entidades que quieran optar a subvenciones figuren en su registro, lo que a su vez da derecho a estar en el órgano si son de carácter regional. Una exigencia que la Dirección General de Juventud de la Junta de Andalucía atribuye a los propios responsables en funciones del CJA, cosa que a su vez éstos niegan.

En este contexto, José Ignacio García, secretario de Juventud en Podemos de Andalucía, apunta: “Se trata de un escándalo y un atropello a la participación en un contexto en el que la sociedad pide más transparencia”. Entre otras cosas, critica que se haya incrementado el censo un 30% el último año con el proceso en marcha y el CJA “secuestrado por el IAJ”.

Por ello, desde Podemos exigen responsabilidades y las explicaciones a Francisco Tomás Pizarro, que era uno de los 17 miembros integrantes de la ejecutiva del PSOE que dimitió para forzar la salida de Pedro Sánchez el pasado año. “En caso de que no tenga forma de justificarse, deberá marcharse”, concluye.

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