Javier Lambán: “Hay que reformar el Título VIII de la Constitución para evitar cualquier tentación centralizadora”
Medianamente anestesiada, de momento, la crisis catalana, en las Cortes de Aragón este jueves tocaba debatir sobre una posible reforma constitucional. Se ha hablado de ello. Y también de Catalunya, del 155, de independentismo… Para todo ha dado de sí la comparecencia –a petición de Podemos– del presidente de la comunidad, Javier Lambán, con el objetivo primigenio –al menos sobre el papel– de tratar “el rol que va a desempeñar Aragón en la anunciada reforma constitucional del modelo autonómico”.
No ha ahorrado calificativos Lambán para referirse al Govern (o exGovern) de Catalunya. Le produce “alivio”, ha señalado, la aplicación del 155, porque “restablece la normalidad y la Constitución ante un Gobierno infame e indigno que arrasa con el Estado de Derecho y la convivencia”. Puigdemont y sus socios, ha remarcado, “son la patulea más indecente que ha gobernado Catalunya”.
Y no se quedó ahí: “Los independentistas se apoyan en un Govern cleptómano y corrupto que usa la independencia para tapar su corrupción. Decían ‘España nos roba’, pero no, eran algunos políticos catalanes los que les estaban robando”.
Tampoco ha sido blando al enjuiciar la posición de Podemos al respecto de la crisis catalana. La invectiva de Lambán contra los morados se ha asentado en asegurar que se están “equivocando profundamente” y que esto hará que la formación “se diluya de manera galopante como partido político de España, que debe perseguir el interés nacional”.
Ha apuntado que, “o reconsideran su posición, o imposibilitarán futuras colaboraciones entre fuerzas de izquierdas para gobernar en este país, porque no tendremos los apoyos necesarios”.
Reforma constitucional
Sí, también se ha hablado de la posible reforma constitucional. Le ha pedido el nuevo secretario general de Podemos Aragón, Nacho Escartín, al presidente que fijara su posición ante lo que para él es el 155: “Una amenaza para los fundamentos básicos del autogobierno, que sobrevuela a Castilla-La Mancha, País Vasco, Navarra y, quizás, Aragón”.
Lambán ha negado tal extremo, aunque sí se ha mostrado proclive a reformar el Título VIII de la Constitución “y evitar cualquier tentación centralizadora de ningún Gobierno”.
El máximo mandatario autonómico ha defendido, “contra viento y marea”, un texto constitucional “que ha dado los mejores 40 años de la historia de este país”. Ha apostado, no obstante, por reformarla, pero, al menos, “con el mismo consenso que hubo en el 78”. Para hacerlo, ha afirmado, “debemos recuperar el espíritu de la Transición”.
Es por la falta de esa entente, por lo que Lambán considera “que no se dan las condiciones para reformarla de manera inmediata”. Lo que no es óbice, según sus palabras, para ir trabajando en una postura común de Aragón en esa futura mesa territorial, aspecto en el que, ha asegurado, ya está trabajando.
Escartín, que ha defendido que Podemos no esté, de momento, en esa subcomisión para reformar la Constitución, ha apuntado que el PP ha aceptado hablar de esa posible modificación a cambio de que los socialistas les dieran “vía libre para aplicar un 155 desmesurado”. En su opinión, PP, PSOE y Ciudadanos “están haciendo una triple alianza de recentralización y, si van por ahí, no nos van a encontrar”.
Ha calificado la reacción de los populares como “una ofensiva sin precedentes contra el Estatut y, de rondón, contra el resto. Usan un Tribunal Constitucional que está KO por la paliza que le ha dado el PP y que va sonado por los golpes”.
Beamonte (PP) a Podemos: “No quiero perder más tiempo con quienes apoyan a golpistas”
El presidente del PP en Aragón, Luis María Beamonte, no ha sido más benévolo en sus críticas a Podemos. De ellos ha dicho que no creen en la Constitución y que no defienden la unidad de España. No se entiende, ha asegurado, “un Podemos que no tenga como objetivo dinamitar un espacio de convivencia que nació en el 78 y que tanto costó construir”.
Tras pedirle a Lambán que mandara ya “a freír espárragos” a sus “socios de gobierno”, ha terminado por espetar que no quiere “perder más tiempo con quienes apoyan a golpistas”.