El PSOE de Zaragoza ahonda su ruptura interna al culminar la operación orgánica contra un concejal electo

La crisis interna que vive el PSOE de Zaragoza tuvo este jueves un nuevo capítulo, con la derrota del concejal Horacio Royo frente al asesor municipal Eduardo Cariñena, el candidato impuesto por la portavoz Lola Ranera, en las primarias de la agrupación del Rabal. El edil fue derrotado con claridad, el recibir el apoyo de 26 afiliados frente a los 56 que votaron por su rival.

Esta ha sido la única agrupación en la que el sector de Pilar Alegría y los afines al lambanista Carlos Pérez Anadón han llegado a enfrentarse, y la pelota ha caído del lado del primero. Ahora se abre un periodo de desestabilización aún mayor en el grupo socialista, dado que tendrán que convivir el propio Royo, uno de los ediles más destacados al controlar el área de Urbanismo, y el mencionado trabajador municipal, que ha sido en los últimos años el secretario de Organización de Royo y que en las dos anteriores legislaturas formó parte del Gobierno de Javier Lambán también como asesor.

En la asamblea, en la que la tónica fue un tono cordial, Cariñena intervino para trasladar a los militantes que, “frente a una Zaragoza gris” con su candidatura optaba “por lo contrario, por la alegría”, en referencia a la ministra de Educación. También participaron entre otros la propia Ranera, quien insistió en que era “una afiliada más”, y el exdirector general del Gobierno de Aragón Raúl Oliván, que reconoció que Royo era un “buen concejal” pero que había sido un “mal secretario general”.

Por su parte, el edil afirmó a la salida de la asamblea sentirse “orgulloso de haber defendido lo que siempre” había “defendido”, pero admitió que se situaba en la actualidad “en una posición legítimamente minoritaria”.

Nadie oculta que el ambiente en grupo municipal “es malo”, como indican fuentes socialistas, con una portavoz sin apoyos tras cambiar de bando a principio de año y con los dos sectores aún sin reconciliarse. La actual operación orgánica, liderada por Ranera con el apoyo de Fernando Gimeno, el enlace del sector de Alegría en la capital aragonesa, no ha hecho sino enconar esta ruptura cuando aún falta año y medio para las elecciones.

Con la votación de este jueves se cierra la renovación en el partido tras la etapa de Javier Lambán. Ya se celebraron los congresos provinciales, con relevos en Zaragoza (Teresa Ladrero) y Teruel (Rafael Guía) y con continuidad en Huesca (Fernando Sabés), y también los locales. En la capital aragonesa, la mayor parte de las agrupaciones han mantenido a sus responsables, salvo alguna excepción como la de San José, ahora con la subdelegada del Gobierno Noelia Herrero al frente.