ZeC pide “responsabilidad” al resto de grupos municipales ante el deterioro del cuartel de Pontoneros
La rehabilitación del antiguo cuartel de Pontoneros, uno de los objetivo de Zaragoza en Común (ZeC) para esta legislatura, ha chocado ya en dos ocasiones con los votos en contra de PP y Ciudadanos y la abstención de PSOE; CHA, por su parte, se mostró a favor en la última votación sobre este asunto. Es por eso que el equipo de gobierno municipal ha querido hacer un gesto de presión con una visita vecinal al histórico edificio para mostrar el deterioro que sufre.
El consejero de Urbanismo, Pablo Muñoz, el concejal de Vivienda, Pablo Híjar, y la presidenta de la Junta de Distrito del Casco Histórico, Teresa Artigas, han recorrido este martes el interior de Pontoneros para explicar a las asociaciones de vecinos del Casco su propuesta de rehabilitación del edificio y su posterior reconversión en 61 viviendas sociales.
El proyecto de Zec para Ponteneros contempla una inversión de 6.4 millones de euros en la rehabilitación. El inmueble, que está protegido por su interés monumental como Bien Catalogado del Patrimonio Cultural Aragonés, presenta, después de años de abandono y falta de mantenimiento, una situación generalizada de deterioro, según han denunciado los munícipes durante el recorrido.
Los tres ediles han hecho un llamamiento a la “responsabilidad” del resto de grupos municipales para que aprueben en el Consejo de Administración de Zaragoza Vivienda el proyecto. Para Pablo Muñoz, según declaraciones recogidas por EFE, lo contrario sería “una locura”, dado el actual estado del antiguo cuartel.
“Mal estado del edificio en su conjunto”
Según ha explicado el consejero de Urbanismo, las obras realizadas por en los últimos años se han centrado en la recuperación de la fachada de la calle Madre Rafols, no así en la de la fachada trasera, por lo que “el aspecto exterior no refleja la realidad del mal estado del edificio en su conjunto”. El plan incluiría la recuperación e integración de los anejos restos arqueológicos de época musulmana actualmente soterrados para su conservación.
En cuanto a la creación de 61 alojamientos colaborativos, el informe facilitado por el Ayuntamiento señala que estarían destinados “a satisfacer las necesidades de dos colectivos especialmente necesitados: jóvenes y personas mayores, e incluyendo también a otro colectivo, el de personas de edad intermedia con disposición de compartir tiempo”. El proyecto también contempla dos unidades de cuatro dormitorios destinadas a familias numerosas.
En palabras de Híjar, “se trata de un modelo de alojamiento en el que, partiendo de la necesidad de privacidad en un espacio propio, se promueve la socialización favoreciendo el contacto entre los residentes a través de actividades compartidas y de la toma de decisiones entre todos sobre aspectos comunes”.