IU rechaza la exhibición de la OTAN en Zaragoza y pide que se dedique a salvar refugiados
Zaragoza se convierte, de nuevo, en el centro de maniobras de la OTAN. En 2015, fue el ejercicio ‘Trident Juncture’ el que desembarcó en la capital aragonesa a 8.000 militares. Ya en aquel caso, IU y CHA mostraron su absoluto rechazo. Ahora, concretamente desde ayer, es la exhibición ‘Tiger Meet’ la que sitúa a la ciudad, otra vez, en el meollo del debate.
Ha sido IU quien ha levantado la voz para rechazar la que es la mayor exhibición de la OTAN en 2016. Cien cazas y helicópteros de 24 escuadrones y 2.000 militares de 15 países europeos estarán, hasta el próximo 27 de mayo, desarrollando las actividades contempladas en este ejercicio.
El responsable de Organización de IU, Álvaro Sanz, considera “inaceptable que España y Aragón se involucren en una exhibición para mostrar el poderío de una organización que rechazamos por su implicación en numerosos conflictos bélicos y sus intereses geoestratégicos”. Para Sanz, “lo único que prima son los intereses geoestratégicos norteamericanos, el control del petróleo en Oriente Próximo y de las materias primas en África”.
Y va más allá: “En una situación como la actual, debería suspenderse y centrar los esfuerzos en el salvamento de refugiados en el Mediterráneo, puesto que la OTAN es directamente responsable del caos de Oriente Medio por las actuaciones militares en Libia y por la injerencia de algunos de los ejércitos miembros de la Alianza Atlántica al entrenar a supuestos rebeldes en Siria y que hoy son parte de la estructura del fanatismo terrorista de Daesh”.
Se refieren también desde la formación de izquierdas a las molestias que sufrirán los vecinos de la ciudad que viven cerca de la base aérea y el aeropuerto. Residentes de barrios como Valdespartera, Arcosur y Rosales del Canal, que ya se quejaron en un comunicado de la escasa información recibida.
IU manifiesta, por añadidura, su preocupación por el riesgo que suponen estas maniobras para la población que vive en zonas limítrofes, recuerda “los graves accidentes producidos en el pasado y advierte de que pueden volver a ocurrir, además de la contaminación ambiental y acústica que provocan”.
