“Solo quiero que nos traten como personas”
Testimonios muy duros se escucharon el pasado miércoles. Voces que reflejan la cruda realidad de los dependientes. Muestras palpables del nivel de degradación al que llegó la atención a la dependencia con el anterior Gobierno de Aragón (PP - PAR).
El encuentro, organizado por el Espacio de Información, Promoción y Defensa de los Derechos Sociales, reunió a alrededor de 150 personas en el Centro de Historias de Zaragoza. Allí estaba el nuevo director gerente del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS), Joaquín Santos, que escuchó en silencio como los familiares, uno tras otro, se lamentaban de lo inanes que habían sido sus esfuerzos y vituperaban la labor realizada por su predecesora en el cargo, Cristina Gavín.
Se oyeron historias como la de Trinidad Bueno, cuya madre fue valorada el 28 de febrero de 2011 y murió el 16 de marzo del año siguiente sin recibir ninguna prestación. Cuando Luisa Fernanda Rudi llegó al Gobierno, dijo, “el caso de mi madre se fue al limbo”. “Que paguen lo que nos deben”, espetó.
O la de Chus Gutiérrez: su marido sufrió un derrame cerebral en 2005, una pancreatitis en 2007 y un ictus en 2010. Le valoraron en 2008. Siguen esperando noticias. Especialmente duro, por la corta edad del enfermo, es el relato de Luis Miguel Gracia. Su hijo, de 5 años, padece síndrome de Down. En 2011 le dieron dependencia grado 2, en 2012 subió a 3 y en 2013 se confirmó la valoración. Pero sigue cobrando como si fuera grado 2: “Llevo tres años reclamando y no he recibido respuesta”.
El padre de Javier Burillo también pereció esperando sus ayudas. Su hijo únicamente quiere mandar un mensaje, tan simple como directo: “Que nos traten como personas; ni la crisis ni la corrupción la hemos provocado los dependientes”.
Una apuesta por la concesión de plazas en residencias
Tras atender a las palabras de los asistentes, Joaquín Santos tomó la palabra. No quiso ahondar en el asunto de ‘la herencia recibida’ y explicó que está trabajando para que la situación mejore lo antes posible. Sin caer en la crítica continua, sí deslizó un dato que puede ejemplificar lo que fue la gestión en la última legislatura: el exconsejero de Sanidad, Ricardo Oliván, dijo en su momento que apostaba por la concesión de plazas en residencias, por encima de la prestación económica. La realidad, según Santos: “7.000 prestaciones menos que se compensaron con 34 plazas”.
“Cumpliendo con la dependencia se crece como sociedad democrática”
Antes de la intervención de los familiares, se dieron algunas pinceladas de la situación actual, y pasada, de la dependencia en la Comunidad: por ejemplo que Aragón tiene la tasa de desatención más alta de toda España (30,9 %) o que con la Administración PP - PAR se perdió un 31,6 % de atendidos.
Ángel Sanz, profesor emérito de la Facultad de Estudios Sociales de la Universidad de Zaragoza, explicó que el Gobierno anterior “ni siquiera se dignó a abrir la puerta”. Queremos, indicó, “que nadie más se muera esperando una prestación” porque con el cumplimiento de la Ley de Dependencia se crece “como sociedad democrática y de derechos y como personas con dignidad”
Tampoco fue parca en críticas la trabajadora social y activista del Espacio Margarita Moya, que pidió a Joaquín Santos que la atención a la dependencia vuelva, “al menos, al nivel en el que estábamos antes de que llegaran el PP y el PAR, que era en los primeros puestos”.
