Noticia servida automáticamente por la Agencia Europa Press

El 'estigma' de un municipio cántabro con la COVID-19: le suman los positivos de una residencia habilitada para infectados

El municipio cántabro de Meruelo se ha visto 'estigmatizado' por los últimos datos oficiales en relación al número de casos y víctimas de coronavirus que se le han atribuido. Y es que el Servicio Cántabro de Salud (SCS), en su última actualización en la web, señala que esta localidad cuenta con 22 positivos, de los que cuatro han fallecido, 13 se han recuperado y cinco siguen activos, unos datos que, según su alcalde, “no son reales”.

La razón, según ha puesto de manifiesto el regidor, Evaristo Domínguez (PP), es que se han sumado al municipio los casos de la residencia habilitada hace mes y medio por el Gobierno de Cantabria para acoger infectados de otros centros, con el objetivo de concentrar allí los positivos de otras residencias de la comunidad que tuvieran pocos enfermos de COVID-19, evitando así el contagio del resto de usuarios.

Así pues, el alcalde ha solicitado este miércoles al SCS la “rectificación inmediata” de los datos porque “son incorrectos y generan una alarma innecesaria entre los vecinos”. “En Meruelo ha habido un caso”, ha subrayado, señalando además que el número de fallecidos también es “erróneo”, puesto que no ha fallecido ningún vecino ni ningún residente del Centro de Atención a la Dependencia (CAD) San Miguel, la residencia habilitada para acoger infectados.

Y es que según el alcalde, los mayores fallecidos del CAD San Miguel son los trasladados desde otros centros de la región, que además han fallecido en el Hospital de Laredo y no en Meruelo.

“De ser así debiera haberse inscrito su fallecimiento en el Registro Civil del municipio y como puede comprobarse por los informes remitidos diariamente por el Registro Civil del municipio, no se han inscrito ningún fallecido por esta causa”, ha subrayado.

Por ello, el alcalde requiere al SCS que rectifique los datos suministrados en el enlace que se publica en los medios, así como los publicados en el informe de Centros Residenciales de Mayores publicado por el ICASS, en el que, según afirma, “los datos recogidos en el informe varían de unas páginas a otras”.