Un abrazo a las Cortes regionales para canalizar la indignación
La cadena humana, convocada por la Asamblea Regional de las Marchas de la Dignidad, se extenderá desde Zocodover, específicamente desde la Delegación de Gobierno, hasta el palacio de Gilitos, sede de las Cortes regionales, pasando por la plaza del Ayuntamiento y el Palacio de Fuensalida, sede de la Junta de Comunidades.
La iniciativa se ha planteado desde el mismo llamado que se repitió el 22 de marzo en Madrid, “Pan, techo y trabajo digno”. El buzón de quejas habilitado en la página http://buzonquejastoledo.blogspot.com.es ha recibido múltiples llamados por parte de los ciudadanos de la región, sobre todo en referencia a los numerosos recortes en materias de sanidad, educación y servicios sociales, así como a la falta de prestaciones por desempleo. La propuesta de las Marchas de la Dignidad se ideó precisamente para esto: canalizar la indignación de los ciudadanos que se enfrentan a situaciones cada vez más difíciles.
Distintas iniciativas han animado a la población a unirse a la convocatoria. Izquierda Unida Regional ha hecho hoy un llamado para luchar en contra del desmantelamiento de los servicios públicos, así como a la ‘involución democrática’, en referencia a la propuesta de Ley electoral presentado por el Partido Popular en la región. IU ha hecho también referencia a la modificación del artículo 135 de la Constitución Española que, en sus palabras, prioriza el pago de la deuda ilegítima en beneficio de los banqueros y sus intereses.
Desde Ciudad Real se han organizado autobuses hacia Toledo que saldrán a las 9.30, con regreso a las 16.30, con un precio de 10€ para los empleados en activo y 5€ para los desempleados. Desde Cuenca también se han organizado viajes, que se pueden consultar a través del correo electrónico marchasdignidadcuenca@gmail.com.
La iniciativa ‘Rodea al Parlamento’ es una campaña a nivel estatal, que según los organizadores, se ha ideado para poner en manifestó la falta de interés de los Gobiernos por los intereses de la mayoría de la ciudadanía. Este desinterés se ha visto manifestado en el empobrecimiento de los más desfavorecidos, a través del desprestigio y merma de los servicios públicos esenciales, como la sanidad y educación, la precarización de las condiciones laborales y la falta de trabajo, los desahucios, y la desatención de la Ley de Dependencia, que ha sufrido graves mermas en la región.
En Castilla-La Mancha, las personas bajo el umbral de la pobreza alcanzan a 1 de cada tres ciudadanos, mientras que aquellos hogares que no logran llegar a fin de mes en condiciones razonables superan el 19%, mientras el paro se ha estancado en una cifra alrededor del 30%, que afecta sobre todo a los menores de 25 años, colectivo que tiene una tasa de desempleo cercana al 60%.
