Los Mossos vigilarán a un violador múltiple sin rehabilitar que se declara “muy arrepentido” tras salir de prisión
Gregorio Cano, el llamado “violador de la Verneda”, ha salido este jueves de la prisión de Brians II (Barcelona). Ha cumplido veinte años de condena por 17 agresiones sexuales, pero no está rehabilitado y presenta un alto riesgo de reincidencia. Por ello los Mossos d'Esquadra, a instancias de la Fiscalía, activarán un protocolo de vigilancia no invasiva del violador una vez recupere la libertad.
En declaraciones a varios medios de comunicación tras salir de la prisión Brians 2 pasada la 1 de la madrugada, Cano ha “lamentado mucho” las violaciones que cometió y ha pedido perdón a las víctimas, a las que hizo, ha asegurado, “tanto daño”. “Estoy muy arrepentido, me ha intentado quitar la vida varias veces, porque no se merece nadie lo que yo hice”, ha dicho Cano, tras asegurar que está “muy arrepentido”.
Cano fue el primer violador de España al que un tribunal aplicaba la medida de computar los beneficios penitenciarios a un condenado sobre el total de la pena impuesta. De esta forma, se le ha obligado a cumplir los 20 años de cárcel efectiva establecidos como máximo por la ley de los 167 a los que fue condenado.
Hasta la reforma del año 2015, el Código Penal no preveía imponer medidas de libertad vigilada a asesinos y violadores que salieran de prisión una vez hubieran cumplido la condena impuesta, por lo que la Fiscalía aprobó un protocolo para garantizar un control no invasivo de los exreclusos considerados como peligrosos.
Ante su puesta en libertad, la Fiscalía ha activado ese protocolo tras recibir informes penitenciarios que alertan de que el violador múltiple no está rehabilitado y su riesgo de reincidencia es elevado. Cano reconoció haber perpetrado 17 agresiones sexuales entre el 23 de febrero de 1997 y el 1 de mayo de 1998 en portales y edificios despoblados de Barcelona, L'Hospitalet de Llobregat y Montcada i Reixac (Barcelona).
Instituciones Penitenciarias comunicó a principios de este mes a la Fiscalía la excarcelación del violador múltiple y le ha alertado de que no se le considera rehabilitado, de acuerdo con los informes de los responsables de tratamiento de la cárcel. Además de ordenar a la policía catalana su seguimiento, la Fiscalía ha requerido a los Mossos d'Esquadra que se pongan en contacto con las víctimas del violador para avisarlas de su excarcelación.
Tal y como prevén los protocolos, los Mossos d'Esquadra ofrecerán protección a las víctimas, que podrán disponer de custodia policial como mínimo durante el período de un mes, prorrogable, desde la excarcelación del violador múltiple.
Cano atacó a mujeres de entre 18 y 39 años de edad amenazándolas con una navaja. Fue detenido en mayo de 1998 después de que la policía le tendiera una trampa utilizando a una agente vestida de paisano. Antes de que la sección quinta de la Audiencia de Barcelona impusiera los 20 años de prisión efectiva a Gregorio Cano, otros depredadores sexuales redimieron gran parte de sus penas realizando trabajos de lavandería o limpieza en prisión, como los conocidos como “violador del Eixample” o “violador de la Vall d'Hebron”, que cumplieron 16 y 13 años entre rejas, respectivamente.
La salida de prisión de Cano ha coincidido con el estallido social provocado por la sentencia de 'la manada', que ha condenado por abuso sexual a cinco jóvenes que violaron a una joven en los sanfermines, y no por agresión sexual como solicitaba la Fiscalía. Colectivos feministas han convocado una concentración en el barrio del Clot este jueves por la tarde para protestar contra la puesta en libertad de Cano.