El apoyo ciudadano anima a la Asociación Llibres Lliures a seguir con su proyecto cultural
La Asociación Llibres Lliures Catalunya no cerrará sus puertas. El apoyo ciudadano recibido durante este mes de enero y la movilización de los socios y vecinos para conseguir fondos para pagar las deudas que amenazaban la continuidad del proyecto, han llevado la entidad sin ánimo de lucro a decidir seguir adelante con su pionera iniciativa de difusión de la cultura en Barcelona ofreciendo libros gratuitos.
Después de semanas de incertidumbre sobre el futuro de la asociación, en la asamblea celebrada este jueves 29 de enero los socios han aprobado renovar la junta y apostar por un cambio de rumbo en la gestión. Una de las propuestas que está encima de la mesa es establecer una tarifa mínima por cada visita a la librería que la entidad tiene en la calle Cantabria 72, en el distrito de Sant Martí. Hasta ahora, las aportaciones eran voluntarias. “Si los 3.000 likes nos visitasen una vez al mes para coger un libro y donasen un euro, imaginad los proyectos culturales libres que podríamos organizar”, aseguran en su página de Facebook.
El mes de diciembre pasado los problemas económicos llevaron la entidad a un callejón sin salida. Las aportaciones de los lectores, las cuotas de 15 euros anuales que pagaban los socios y los precios testimoniales que se cobraban por los cursos eran insuficientes para pagar el alquiler del local, los gastos de mantenimiento de los servicios y los impuestos. Además, a la deuda acumulada se añadió el desinterés mostrado por el Ayuntamiento de Barcelona por subvencionar el proyecto a pesar de haberlo considerado un ejemplo de asociación innovadora. Ahora, la entidad tiene previsto reunirse en breve con el regidor del distrito de Sant Martí, Eduard Freixedes, para reconducir la situación, según han asegurado fuentes de la asociación cultural.
Sin embargo, la falta de recursos no ha sido el único problema que ha puesto en peligro la continuidad del proyecto de Llibres Lliures Catalunya. El hecho que la entidad, que abrió sus puertas en el año 2013, trabaje únicamente con voluntarios hace muy difícil mantener tanto la atención al público como la organización de cursillos y la participación de la asociación en ferias populares y otros actos culturales de la ciudad. La asociación ha funcionado hasta ahora sin ninguna subvención pública y gestiona un fondo de 12.000 libros obtenidos de donaciones particulares. El usuario puede llevarse todos los ejemplares que le quepan en una mano.