En Catalunya se diagnostican 772 casos de melanoma al año, uno de los tipos más graves de cáncer de piel. Según datos del Departament de Salut de la Generalitat 426 se diagnostican en mujeres y 346 en hombres. Se trata de un cáncer con baja incidencia, pues representa sólo el 2,7% de todos los tumores en mujeres y el 1,5% en hombres. A pesar de ello el melanoma es el tipo de cáncer de piel más agresivo y uno de los que más ha aumentado en los últimos años.
A razón del Día Europeo de la Prevención del Cáncer de Piel, que pretende concienciar a la ciudadanía sobre esta enfermedad, desde el Departament de Salut y otras entidades que trabajan para la prevención del cáncer alertan de los riesgos de tomar el sol y aconsejan protegerse de la exposición y utilizar cremas. “Más del 80% de los casos se podrían prevenir si se evitara la exposición intensa al sol y a las quemaduras cutáneas”, avisan desde el Gobierno. Aunque muchas veces el sol se asocia a cáncer de piel, el doctor Ramón Grimalt, dermatólogo y profesor de la Universidad de Barcelona (UB), explica a Catalunya Plural que lo que marca el riesgo de tener cáncer de piel es la genética sobre todo, no sólo el estilo de vida. “Con una determinada genética, el estilo de vida influencia”, aclara. Así por ejemplo, una persona de piel morena, de origen centro africano puede estar más horas al sol y no desarrollará cáncer de piel. En cambio, un Noruego, explica el doctor Grimalt, que esté dos semanas cada verano en Mallorca, por poner un ejemplo, puede acabar padeciendo la enfermedad, ya que se trata de un colectivo más predispuesto a padecerla, debido a factores genéticos. La exposición al sol es un factor de riesgo, sobre todo para aquellas personas con más predisposición a tener esta enfermedad.
Esto explicaría que Australia sea el país donde más cánceres de piel se diagnostican, y que en cambio esta enfermedad sea menos incidente en regiones como centro África. “En Australia a los niños que no llevan gorra les prohíben salir al patio”, explica el doctor Grimalt, que dice que acciones como esta o repartir crema solar salen más baratas al Gobierno que la inversión en salud que hay que hacer después para curar estos cánceres. La OMS alerta de que más del 90% de cánceres de piel no melanomas se dan a personas de piel blanca que se han quemado alguna vez bronceándose. Los principales factores de riesgo, además de la exposición al sol y la genética, son los antecedentes familiares de melanoma, u otros elementos químicos como las luces para broncear que funcionan con radiaciones ultravioletas A y B.
Factores sociales: ¿por qué tomamos el sol?
En la India, donde el poder económico y político se concentraba en manos británicas debido a la colonización, personas de piel blanca, las cremas de blanqueador de piel son uno de los productos de estética más vendidos, como ocurre también en otros países asiáticos, como Japón. “Ser moreno de piel en estos lugares es símbolo de clase social baja”, explica el doctor Grimalt. Más allá de conocer los factores directos que incentivan la aparición del cáncer de piel, el doctor habla de los factores sociales que hay más allá y que influyen en la salud.
Aquí, hace unos años, las personas con más capacidad económica tenían más tiempo para ir a la playa o para hacer actividades al aire libre y por eso el color de la piel más morena se asocia a personas con un nivel de vida más alto. “Pasa como con el tabaco”, explica el profesor de la UB, “antes era un signo de clase y ahora en cambio da más bien vergüenza”, dice. Se trate de dinero e imagen y lo mismo ocurre, explica, con la depilación o comer mucho, lo que provoca obesidad. “Es así porque el beneficio es inmediato y el riesgo es hipotético y muy lejano”, puntualiza. De 25 a 30 años de latencia para el cáncer de piel, así pues, los riesgos de una exposición al sol por parte de personas predispuestas al cáncer de piel no se verá hasta dentro de tres decenios. “Todo el mundo conoce los riesgos pero lo olvidemos a cambio de hacer algo que es mucho más reconfortante”, explica el doctor Grimalt. De hecho, es por esta misma razón que las máquinas de radiación artificial aún no están prohibidas, porque las consecuencias de esta práctica, explica este médico, no se verán hasta dentro de unos años.
Por estos mismos factores sociales dice que puede ser que en un tiempo, debido a la llegada de personas del sur en Europa, algunos jóvenes prefieran estar más bien blancos y no morenos, para dejar claro que son de aquí, a pesar de tener origen extranjero. “Pasará al revés” explica el doctor Grimalt.
Recomienda que la gente piense que la “imagen es de cada uno y que se trata de algo personal”. “Si quiero vivir más años y con buena salud, mejor protegernos del sol, y como menos cremas mejor”, recomienda además.
Él prefiere no incidir tanto en la utilización de cremas de protección solar, donde puede haber un negocio detrás de las industrias productoras de este cosmético, sino en evitar la exposición al sol. “No tomar el sol significa cambiar de actitud”, aclara. “El modo correcto de proteger a un niño no es sacarle la camiseta en la playa y ponerle protección solar”, añade, sino, dice, dejarle la ropa puesta. Por ello, en países con fuertes radiaciones solares, como Kuwait, explica, la mayoría de gente sale a la calle tapada.
¿Qué es el cáncer de piel?
Una de cada 99 mujeres i uno de cada 91 hombres desarrollará en Catalunya un melanoma al largo de su vida, según Salut. Por otro lado, la OMS informa de que se diagnostican entre dos y tres millones de cáncer de piel no melanomas al año en todo el mundo y más de 130.000 melanomas malignos.
Las células que fabrican el color de la piel se denominan melanocitos, y se encuentran entre la epidermis y la dermis, dos capas que tiene la piel. Estas células elaboran una sustancia llamada melanina que es la responsable del color de la piel, el cabello y los ojos. Lo que hace la melanina es proteger la piel de los efectos nocivos de las radiaciones del sol. Ahora bien, en ocasiones, la transformación maligna de los melanocitos da lugar al melanoma, un tipo de cáncer de piel agresivo.
Aparte de este, sin embargo, existen otros cánceres de piel, los carcinomas cutáneos que aparecen sobre todo a partir de los 50 años en personas de piel más blanca.
Ambos tipos tienen un alto porcentaje de supervivencia, sobre todo si se detectan a tiempo. Según la Asociación Española Contra el Cáncer representan sólo alrededor del 0,1% de las muertes por cáncer. “Si se cogen a tiempo se curan casi todos”, asegura a Catalunya Plural el doctor Ramón Torné especialista en dermatología. Lo que más destaca este doctor es la importancia de la detección precoz. “Los dermatólogos recomendamos que ante cualquier lesión en la piel si en un mes no se ha ido es motivo de consulta, no tiene porque ser cáncer pero no hay que dejarlo pasar”, aconseja. El cáncer de piel se puede curar con cirugía, láseres CO2, inmunomoduladores tópicos u otras terapias.
El doctor Torné recuerda que la exposición al sol no sólo provoca cáncer sino que también produce un envejecimiento prematuro de la piel, que se puede traducir en manchas, dilataciones vasculares o adelgazamiento de la piel. Pero también recuerda que una exposición muy moderada ayuda a sintetizar la vitamina D, “el problema es el abuso”, recuerda.