El escaño más buscado en Catalunya: PP y Ciudadanos pugnan por un diputado en Tarragona
El 24 de diciembre de 2017 se escuchó un suspiro de alivio en el PP catalán. Tres días después de las elecciones autonómicas, el voto por correo le quitaba un escaño a Ciudadanos por Tarragona y se lo concedía a los populares. Ese giro de guion permitió al presidente del partido, Alejandro Fernández, acceder al Parlament, donde los populares no tienen grupo propio.
La historia se podría repetir el próximo 28 de abril. Las encuestas vaticinan que uno de los seis escaños que se reparten en Tarragona será para un partido de derechas, pero nadie sabe si será azul o naranja. PP y Ciudadanos están determinados a pelear por este diputado y ambas formaciones han decidido poner toda la carne en el asador y mandar a sus primeras espadas a la provincia, uno de los lugares en los que el PP catalán obtenía siempre representación.
Pablo Casado solo realizará dos actos en Catalunya durante toda la campaña, y uno de ellos fue el miércoles en Tarragona. El presidente del PP visitó una compañía aeronáutica en Reus y después participó en un acto junto al presidente del PP catalán, Alejandro Fernández, y el candidato popular por esa provincia, Jordi Roca.
“Os pedimos vuestra ayuda”, imploró Roca al centenar escaso de asistentes al acto. “Por favor, el 28A pedid el voto para la revolución tranquila: no se puede desunir España si desunimos el voto”, añadió, en una clara referencia a una fuga de votos a Vox que podría acabar perjudicando a ambos partidos en la provincia.
La irrupción del partido de extrema derecha genera nervios en el PP catalán, sobre todo después del último barómetro del CIS. Vox podría capitalizar casi todo el voto anticatalanista en la provincia de Barcelona y robarle al PP hasta tres de los cuatro diputados que obtuvo en 2016. De cumplirse este pronóstico y no obtener escaños en ninguna otra provincia, Cayetana Álvarez de Toledo sería la única diputada que obtiene el PP en Catalunya de los 47 que están en juego.
La estrategia del partido para frenar esta sangría de votos hacia Vox tiene dos ejes. Por un lado, tratar de atraer el voto útil en Barcelona con la presencia de líderes como José María Aznar -que estuvo en la ciudad el pasado viernes- y Pablo Casado, que acudirá el jueves que viene a la capital catalana. Por otro, pelear por conseguir el mencionado escaño en Tarragona y, de ser posible, otro por Lleida. El pasado domingo ya hubo un acto de los populares en Tarragona y este domingo Álvarez de Toledo volverá a la provincia en un acto en Salou.
“El sondeo del CIS no incluye el efecto Cayetana”, respondía esta semana un dirigente del PP catalán, que insistía en que los sondeos internos que maneja el partido son más optimistas. En el PP catalán recuerdan que Tarragona es la zona de su presidente, Alejandro Fernández -fue edil del Ayuntamiento hasta 2016- y señalan que la gestión del partido en el Consistorio tarraconense, donde gobiernan junto al PSC, es una de sus mejores cartas de presentación.
Ciudadanos teme la fuga al PSOE
Si a los populares les preocupa Vox, a Ciudadanos la fuga en Tarragona le podría llegar por la izquierda. La subida del PSOE en los sondeos y 'trackings' internos de los partidos ha disparado las alarmas en el partido de Rivera, que observa como muchos de los 38.898 votos que obtuvieron en la provincia podrían marcharse ahora a filas socialistas.
El PSC podría sumar dos escaños en la provincia a costa del diputado que obtuvo Ciudadanos y el que consiguió En Comú Podem, ahora mismo en entredicho. En la formación de Albert Rivera la confianza es mayor, pero también están dispuestos a pelear por ese escaño y mañana por la tarde estará Inés Arrimadas en Salou, en lo que será su primer acto en Catalunya tras una semana de campaña en la que el partido solo ha realizado actos pequeños protagonizados en su mayoría por el número dos en el Parlament, Carlos Carrizosa.
