La CUP pide una comisión de investigación sobre los Mossos tras el “fracaso” de la auditoría interna
La CUP ha propuesto en el Parlament crear una comisión de investigación sobre las actuaciones policiales de los Mossos d'Esquadra tras el “fracaso” de la auditoría interna presentada este lunes por la policía autonómica sobre su actuación para contener las protestas contra la sentencia del procés del pasado mes de octubre.
Los 'cupaires' quieren que se analicn los mecanismos internos de control, evaluación y corrección y estudiar la posibilidad de implementar mecanismos independientes de control y fiscalización de las actuaciones policiales. La auditoría hecha pública por Interior el lunes se limita a anunciar que se han investigado 34 actuaciones y 50 agentes por malas praxis. Solo un agente ha sido suspendido.
El documento no detalla qué actuaciones concretas de la policía autonómica se analizaron y es más bien un compendio genérico sobre el futuro del modelo de orden público de los Mossos, lo que provocó las críticas tanto del Síndic de Greuges como de entidades en defensa de los derechos humanos y grupos parlamentarios.
Los anticapitalistas lamentan que la auditoría interna no especifique las actuaciones policiales que se han revisado ni creen que tenga en cuenta el centenar de víctimas de agresiones policiales y la vulneración de derechos fundamentales durante las protestas postsentencia.
Asimismo, la CUP quiere que el Parlament vote sobre una propuesta para instar a la conselleria a suspender de empleo y sueldo a los seis agentes implicados en una agresión racista, que a día de hoy siguen trabajando en el cuerpo tras cambiar de destino. Tal y como ha adelantado eldiario.es, los mossos imputados por la agresión racista de Manresa han pedido al juez archivar el caso y que la víctima no pueda identificarlos.
Los 'cupaires' también han presentado otra propuesta de resolución para instar a la Generalitat a retirarse de la acusación particular y la solicitud de archivo de todas las causas abiertas por disturbios relacionados con el procés, que la CUP enmarca en el ejercicio del “legítimo derecho a la disidencia política” .
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