La plataforma Tanquem Cofrents ha denunciado un nuevo accidente en la central nuclear de Cofrentes este jueves 9 de septiembre, concretamente se trata de una fuga de agua “altamente radioactiva” en la turbina de la central, en el circuito primario del reactor. El colectivo advierte que esta fuga se ha producido “fuera de la contención del reactor, cuya misión es precisamente mantener las posibles fugas de vertidos radioactivos aisladas del exterior”.
La central nuclear de Cofrentes (Valencia) comunicó al Consejo de Seguridad Nuclear que este jueves a las 10:17 horas se produjo “una parada automática del reactor debido a la disminución del nivel de agua en la vasija del reactor. Esta disminución de nivel ha sido provocada por un descenso en el caudal de agua de alimentación que, de forma preliminar, el titular identifica que puede estar relacionado con los trabajos que se estaban ejecutando en las válvulas de los filtros del Sistema de Purificación de Condensado”.
“Durante la revisión posterior de sistemas y planta, el titular ha identificado una fuga de agua en la zona donde anteriormente conectaban el sistema de drenaje de calentadores en la descarga de las bombas y el sistema de filtros electromagnéticos. Al tratarse de líneas con aislamiento térmico y para valorar la reparación de la fuga, el titular ha decidido iniciar las acciones para alcanzar el modo 4 (Parada Fría), y actualmente está en proceso de descenso de temperatura y presión en la vasija”, señala en su comunicación la central.
El titular continúa con la recuperación y comprobación de sistemas y mantiene en curso el análisis del origen de la disminución de nivel de agua. El CSN, según se establece en sus procedimientos, ha informado a través de su página web de la recepción de notificación de este suceso. “El suceso no ha tenido impacto en los trabajadores, el público ni en el medio ambiente”, concluye la comunicación
Este accidente ha supuesto la primera parada no programada de la central desde la renovación de su licencia de funcionamiento, en marzo de este año, por lo que Tanquem Cofrents lamenta que “pone de manifiesto la imprudencia que ha supuesto esta renovación por parte del Gobierno”.
La central de Cofrentes, que ya ha cumplido 37 años de funcionamiento, mucho más allá de su vida de diseño, “esta vieja y deteriorada, y combinado con la política de su dirección de maximizar la producción a toda costa, hace más que previsible que accidentes como este o más graves se repitan” alertan desde la plataforma ecologista.
Ante esta situación Tanquem Cofrents ha insistido en que se cierre de una vez esta central “que pone a toda la ciudadanía en peligro, y que se haga una transición rápida a un sistema basado exclusivamente en energías renovables, que evite un cambio climático catastrófico y que será más limpio, seguro y económico”.