El Consell “destierra” a varios colectivos de mujeres abocándolos a la desaparición
La conselleria de Bienestar Social intenta, por segunda vez, desalojar a varios colectivos de mujeres del piso que ocupan desde hace 25 años en la calle Martínez Cubells de Valencia para trasladarlas a una alquería ubicada en un polígono industrial próximo a Burjassot, “la alquería está muy bien, pero muy apartada, entre solares, vías rápidas y naves industriales, aunque eso sí, con una parada del metro próxima”, explican desde la Federació de Dones Progressistes.
Precisamente, la Federació de Dones Progressistes ocupa este edificio junto a la Asociación de Agentes por la Igualdad de Oportunidades, Asociación de Amas de Casa y Consumidoras Aitana, Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama Ammcova, Associació per la Co-Educació, Associació de Comares, Associació per a la PRotecció i Integració de la Dona Prim, Acció Positiva, Asociación de Mujeres Separadas y Divorciadas y Dona Major.
Desde la Federació de Dones Progressistes apuntan cómo el año pasado ya recibieron una comunicación de la Conselleria por la que debían abandonar el local que ocupan y les daban un plazo de quince días sin proponerles alternativas. La directora general de Damilia y Mujer, Laura Chorro, “se comprometió con nosotras a buscar una medida de consenso”.
En esta ocasión, sí que se les ofrece una ubicación alternativa, un edificio “inadecuado” para estos colectivos, que requieren una ubicación céntrica, “entre todas las asociaciones recibimos a unas mil mujeres cada año, algunas de ellas amenazadas y con escasos recursos”, explicaban, al tiempo que añadían que se trata de asociaciones que no reciben ningún tipo de subvención.
Respecto al coste del alquiler, advierten que pese a que Conselleria se refirió a 25.000 euros al año, “nosotros tenemos constancia de que se están pagando 1.200 euros al mes, y creemos que el coste de acondicionar y mantener la alquería, además del hecho de que necesitaríamos seguridad, sería más elevado”, y continúan, “sólo queremos una ubicación céntrica”.
Desde la asociación de mujeres Separadas y Divorciadas, su presidenta, Virginia, recordó que llevan 25 años en el mismo edificio “trabajando de forma muy profesional con mujeres en situación de vulnerabilidad”, así como apuntaba que el coste para el Consell es de unos 150 euros al mes por asociación, colectivos que no reciben ningun tipo de subvención pública, apuntan.
En el caso de verse obligadas a trasladarse a una ubicación menos adecuada, advierten que van a perder usuarias, “nos abocan a la desaparición, que parece que sea lo que quieren”, explican desde estos colectivos, que no ven justificadas las razones económicas.
Reuniones con partidos
Desde estos colectivos se han reunido recientemente con representantes de partidos valencianos para recabar su apoyo. Precisamente, desde el PSPV, Rosa Peris, vicesecretaria de Igualdad, reconocía que este “exilio” dificultaría la actividad de estas asociaciones, y mostraba su apoyo y solidaderidad hacia estas organizaciones.