Puig considera un “fracaso” la falta de acuerdo para la presidencia de la nueva RTVV
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, se ha mostrado este miércoles “decepcionado” por el “fracaso” que ha supuesto que los grupos parlamentarios de las Corts no hayan sido capaces de ponerse de acuerdo para el nombramiento del presidente y del Consejo Rector de la nueva Radiotelevisión Valenciana (RTVV), que pasará a llamarse Corporación Valenciana de Medios de Comunicación.
Puig se ha expresado en estos términos en declaraciones a los medios de comunicación en los pasillos de las Corts tras el pleno, después de que los cinco grupos parlamentarios hayan decidido aplazar hasta septiembre los primeros nombramientos para la puesta en marcha de la nueva televisión y radio públicas valencianas.
Al respecto, el jefe del Consell ha dicho sentirse “decepcionado” por “la incapacidad de llegar a un acuerdo para poner en marcha la nueva RTVV”, que considera que es “una urgencia para la Comunitat Valenciana, no para el Gobierno”.
“Habría estado bien que se hubiera avanzado en una decisión razonable y de acuerdo”, ha señalado Puig, quien ha añadido: “Igual que fue un éxito cuando se aprobó, ahora es un fracaso”.
A su juicio, la falta de acuerdo “tiene que ver con lo que ha sido el final de una etapa, con una situación que ha enrarecido mucho la televisión”, porque desde el cierre hasta ahora ha habido “un entorno muy desfavorable”. Además, cree que ha habido “falta de sensibilidad por parte de algunos grupos”.
“LA TELEVISIÓN NO PUEDE SER UN CAMPO DE BATALLA”
Según Ximo Puig, “se debe actuar con madurez y pensando que esto no es una televisión de unos contra otros, todo el mundo tiene que tener algún tipo de participación”, porque “la televisión valenciana no puede ser un campo de batalla”.
El 'president' espera que “todos los actores piensen en el interés general, que es que tengamos una RTVV de calidad y tenga apoyo”, pero ha lamentado que ya incluso antes de ponerse en marcha haya este tipo de “riñas”, “La nueva RTVV no puede ser un 'pin, pan, pun', porque eso iría en contra de los intereses de los valencianos”, ha resaltado.
Puig cree que la nueva Corporación se podría poder abierto el 9 d'Octubre de 2015 y podría estar en funcionamiento el próximo Día de la Comunitat, pero “las decisiones las deben de tomar de una manera concertada, democráticamente y deliberativamente”.
En su opinión, RTVV es necesaria “para que los valencianos sepan algunos de los problemas que tenemos”, también “para que los niños tengan un medio donde escuchar valenciano” y “para el sector audiovisual que se está debilitando enormemente”. Del mismo modo, cree que es importante “para la cultura, la vertebración y para coser la Comunitat”.
Ante el rechazo del PP y de Ciudadanos al candidato a presidir la nueva Corporación, Josep López, --de quien se ha dicho que es amigo de Puig--, el 'president' ha dicho que tiene “un gran respeto profesional” por él, que fue “de aquellos periodistas de Canal 9 que sí estuvo en el Comité de Redacción denunciando la manipulación informativa”. Asimismo, ha indicado que “no hay enemistad, pero tampoco una relación personal”.
“El planteamiento que se ha hecho ha llegado a niveles de ridículo monumental”, ha destacado Puig, quien ha añadido: “Si con todos los periodistas con los que tengo buena relación o una relación de amistad, no puede nadie tener ningún tipo de vinculación con la televisión, lo vais a tener muchos muy complicado”, ha dicho a los medios de comunicación. “Es ridículo y patético”, ha resaltado.
MODELO “PARTIDARIO”
El jefe del Consell ha explicado que “se pusieron varios nombres encima de la mesa” y el de Josep López “fue el que tenía más consenso y por eso fue el que se propuso”. Asimismo, ha criticado “la cultura del veto” y también ha dicho que él no hubiera optado por un diseño “partidario”. Al respecto, ha señalado que se pensó: “Que el Gobierno no ponga sus sucias manos en la televisión”, pero ha lamentado que “todos los demás sí las pueden poner”.
Para Ximo Puig, “los enemigos de la radiotelevisión pública valenciana hoy pueden estar contentos porque han ganado una pequeña batalla, pero no ganarán la guerra”, ha apostillado.