Obras de ciencia ficción españolas para armarse contra el Apocalipsis como ha hecho Francia
Las historias de ciencia ficción existen porque a los terrícolas siempre nos pillan de improviso las amenazas del futuro. Ya sean medioambientales, robóticas, políticas o alienígenas, en el cine y la literatura la raza humana carece del nervio anticipatorio para armarse rápido contra ellas y plantarles cara. Es útil para mantener la tensión del relato, pero Francia no se la ha querido jugar en la vida real.
Hace unas semanas, el Ministerio de Ejércitos -similar al de Defensa- del país vecino anunció que había reclutado a un Equipo Rojo formado por seis escritores de ciencia ficción para “imaginar más allá”. Parece el comienzo de una novela del género, pero lo que pretende Emmanuel Macron con ello es proyectar los “escenarios disruptivos” terrestres y espaciales del futuro para poner a sus soldados en antecedentes.
El de Francia es el quinto ejército más poderoso del mundo y su nueva estrategia no carece de antecedentes. El primero y más evidente es el alunizaje que predijo Verne en 1865 en la novela De la Tierra a la Luna y que inspiró a rusos y norteamericanos en sus primeras incursiones espaciales. También 20.000 leguas de viaje submarino, publicada en 1870, sirvió para surcar las aguas desde las profundidades tres décadas después.
Años más tarde, H.G Wells asesoró a Churchill y a Stalin antes de la Segunda Guerra Mundial e Isaac Asimov hizo lo propio en el departamento de Defensa de EEUU para la creación de un sistema antimisiles. ¿Es exagerado armarse contra una guerra de los mundos? ¿Deberían el resto de países tomar nota de Francia y crear su ejército de literatos? Y, por último, ¿quienes conformarían nuestro Equipo rojo?
La Biblioteca Nacional Española ha nutrido una interesante base de datos acerca de la ciencia ficción como género en el mundo y en nuestro país. “Desde Seis días fuera del mundo (1905), de Juan Pérez Zúñiga, una de las primeras obras en español que describe un viaje interplanetario, son muchos los autores que nos han deleitado con sus aventuras futuristas”, señalan en su plataforma.
Apoyándonos en su investigación sobre los clásicos hispanos, seleccionamos siete libros que podrían ayudar a colaborar con el ministerio de Margarita Robles (al menos hasta que haya investidura o elecciones). Si tienes alguna sugerencia de lectura que compartir con los lectores de eldiario.es, no dudes en dejarla en los comentarios.
Gabriel, de Domingo Santos (Infinitum)Gabriel
Domingo Santos, seudónimo de Pedro Domingo Mutiñó, fue una institución dentro de la ciencia ficción de nuestro país y Gabriel constituye su obra capital. También fue la primera del género en ser traducida a diversos idiomas y en traspasar las fronteras nacionales.
La colección Nebulae la editó en el año 1962 en su número 85. Sin embargo, la segunda edición dentro de la colección Infinitum Ciencia Ficción, ya en el año 1975, fue imprescindible para dibujar su éxito.
Puede parecer que hemos leído y visto la historia de Gabriel cientos de veces, pero en aquel momento se trató de una investigación sociológica que abordaba los límites de la inteligencia artificial sin parangón. Santos incide sobre todo en las cuestiones éticas de relaciones sexuales y en cómo las sex machines cambiarían la manera de entender el contacto humano.
El mundo de Yarek, de Elia Barceló (Lengua de Trapo)El mundo de Yarek
El especialista en vida alienígena Lennart Yarek, miembro de la Academia Interplanetaria de Estudios Ahumanos, es juzgado culpable del genocidio de los habitantes del planeta Viento, los aarea, a quienes catalogó como especie animal no inteligente con el fin de utilizar la disponibilidad de su mundo para la colonización humana.
Ahora, Yarek se enrenta a la más terrible de las condenas: veinte años de destierro en un planeta deshabitado, estéril, con la sola compañía de un ordenador, sus recuerdos y sus pesadillas.
Con este punto de partida, El mundo de Yarek nos envuelve en la experiencia extrema de un hombre que irá pasando del pánico a la frustración, la culpa, el hastío y el mesianismo. Elia Barceló es una de las pocas plumas femeninas que forma parte del núcleo revolucionario de escritores de la ciencia ficción. Con este libro consiguió el cotizado premio UPC en el año 1993.
Lágrimas de luz, de Rafael Marín Trechera (Ediciones Gigamesh)Lágrimas de luz
Favorita indiscutida de la ciencia ficción española, la novela Lágrimas de luz y los relatos A tumba abierta y Ébano y acero trasladan al mundo del space opera los elementos que dieron gloria a los cantares de gesta medievales.
Partiendo de las imágenes más tradicionales de ambos géneros y haciendo gala de un estilo virtuoso, Rafael Marín dio forma a un ciclo que se ha convertido en verdadero referente para los aficionados españoles desde su publicación original en la década de los ochenta.
Rafael Marín nos presenta una Tercera Edad Media en la que la agresiva Corporación viene a tomar el papel del Imperio Romano. En ese particular marco se reinterpreta el lema romano de “pan y circo” por un nuevo “sexo y drogas”. A pesar de los siglos de diferencia, una vez cubiertos los instintos y las necesidades básicas, sigue siendo fácil dominar y adormecer al pueblo.
El señór de la rueda, de Gabriel Bermúdez Castillo (Epicismo)El señór de la rueda
En un mundo surcado por autopistas en las que circulan miles de castillos rodantes, el joven Sir Pértinax le Percutens es nombrado caballero. Sus únicas preocupaciones son justar, amar a cuantas damas precisen de su amor y honrar a Su Majestad el Rey Arturo.
Gabriel Bermúdez es uno de los grandes nombres de la ciencia ficción española y su papel en la evolución del género es hoy incuestionable. El Señor de la Rueda es su libro más personal, diferente y transgresora. Algo que le valió la etiqueta de novela de culto desde que se publicó en 1979 por primera vez.
Precisamente, ha sido adaptada a juego de rol por la editorial Epicismo a través del portal de mecenazgo Verkami, que también la ha reeditado gracias a una campaña de crowdfunding.
Mundos en el abismo, de Juan Miguel Aguilera (Bibliópolis Fantástica)Mundos en el abismo
El cúmulo globular de Akasa-Puspa es un pequeño universo de diez millones de soles, tan cercanos entre sí, que los viajes interestelares son posibles incluso con la tecnología más elemental.
Jonás Chadragupta es un científico que investiga el origen de la Humanidad en Akasa-Puspa. ¿Cómo llegaron los primeros humanos hasta allí y en qué circustancias? Pero Jonás ha sido reclutado para una misión en una remota zona del cúmulo, donde hallará la sorprendente y espectacular respuesta a este enigma.
Mundos en el abismo constituye una de las sagas más veteranas del género en nuestro país y su artífice, Juan Miguel Aguilera, es una presencia constante en los grandes premios de ciencia ficción.
Nox perpetua, de Javier Negrete (Círculo de lectores)Nox perpetua
El maestro Mondsar se sabe muy viejo y poco tiempo le queda ya para hacer realidad el sueño que alberga desde hace muchos años: Llegar al Polo Norte del planeta Mehrs. Para lograrlo cuenta con el mejor de sus discípulos, el joven Ark Rhenius.
Pero no es empresa fácil, pues deberán atravesar el inmenso desierto nevado, un lugar inhumano de frío extremo. Y hay algo más. Efectivamente en ese lugar les aguarda algo extraordinario, algo inimaginable.
Javier Negrete es licenciado en filología clásica y profesor de griego, pero su nombre es bastante más conocido en los entornos de la ciencia ficción, donde lleva en activo treinta años. Lux Aeterna le mereció una mención especial en la edición del premio UPC 1995 y, al año siguiente, publicó Nox Perpetua, con un carácter mucho más aventurero que sus anteriores obras.
Las islas del infierno, de Ángel Torres Quesada (Ultramar)Las islas del infierno
Ocurrió en un instante, apenas duró unos segundos, pero aquel prodigioso momento que tuvo lugar de forma simultánea en toda la faz de la Tierra, cuando aparecieron las extrañas zonas compuestas de arena y rocas grises, iba a pasar a la historia como el Día del Misterio.
Aquella misma madrugada, un locutor de la BBC las llamó las islas del infierno, porque creía que algo tan horrible y estéril sólo podía proceder de los dominios de Lucifer.
Las islas del infierno forma parte de la famosa trilogía de las islas (1989) de Ángel Torres Quesada, uno de nuestros más queridos y veteranos autores de ciencia ficción. Sus inicios fueron dentro de la categoría pulp del género, aunque el grueso de su carrera dentro de la literatura de ciencia ficción popular la desarrolló bajo varios seudónimos. El caso que nos ocupa es una de las grandes excepciones.
