Valencia ahorra 170 millones de euros gracias a la administración electrónica
La simplificación de la burocracia y la digitalización de los documentos no solo hace más cercana la administración al ciudadano. Sino que también conlleva una reducción de los costes de la administración. Esa es la conclusión que se extrae de la primer año de aplicación del plan integral de administración electrónica (PIAE) en el Ayuntamiento de Valencia.
Impulsado por el anterior equipo de gobierno del PP y continuado por el actual tripartito municipal, en los doce primeros meses de aplicación ha conseguido ahorrar 170 millones de euros a las diezmadas arcas públicas municipales. Un ahorro que cumple con uno de los objetivos del propio plan impulsado en primera instancia por el Gobierno central: la reducción del gasto público.
Sin embargo, los otros propósitos de esta estrategia, como es una mayor eficiencia en la prestación de los servicios a los ciudadanos, también se ha logrado con creces. “El tiempo de tramitación se ha reducido entre un 15% y un 20% al eliminar el tiempo empleado en mover físicamente los expedientes en papel”, ha indicado Pere Fuset, concejal delegado de administración electrónica. Fuset también ha remarcado “la eliminación de trabas administrativas” que ha conseguido este sistema.
“Ahora el ciudadano puede hacer cualquier trámite cómodamente de manera online, incluso desde su smartphone con la app municipal”, ha señalado el edil de Compromís. “El consistorio ha logrado una mayor interacción entre la administración, el ciudadano y la empresa”, ha insistido. No en vano, se ha registrado 6.445 documentos nuevos de promedio diario.
Dicho plan, a su vez, ha logrado una transformación de la Administración. Se ha digitalizado 1,8 millones de documentos, hecho que ha comportado una reducción del 70% de los movimientos en papel. Además, el 100% de los expedientes tramitados se han firmado de forma electrónica y un 83% de ellos tenían todos sus documentos exclusivamente en formato electrónico.
