Las cuentas de la patronal que sostienen que el salario mínimo es un 5% más alto “de lo que debería”
“Tendría que ser cero”. Con estas palabras, el líder de la patronal CEOE, Antonio Garamendi, ha sostenido que el salario mínimo interprofesional (SMI) no debería subir nada este año, aunque los empresarios han planteado un alza “más que generosa” del 1,5%. ¿Por qué? Porque, según la patronal, este sueldo mínimo ya está “bastante por encima de lo que debería”. En concreto, lo cifran en un 5%, con su propio cálculo de cuál es el salario medio en España. Una estimación que rebate la que realiza anualmente la comisión de expertos que asesora al Ministerio de Trabajo y que está a punto de presentar su próxima valoración.
El nuevo planteamiento desplegado por la patronal de un SMI “sobredimensionado”, novedoso frente al de los últimos años, pretende romper con la referencia que ha estado guiando los aumentos del salario mínimo por parte del Gobierno de coalición, y que lo han situado en los 1.184 euros brutos al mes, en 14 pagas, en 2025. Supone un 61% más que en 2018, cuando Pedro Sánchez llegó a La Moncloa.
El Ejecutivo de coalición ha vinculado el SMI a una meta: que alcance al menos el 60% del salario medio neto del país, siguiendo el criterio del Comité Europeo de Derechos Sociales sobre la Carta Social Europea. Para ello, el Ministerio de Trabajo formó una comisión de expertos y expertas, que ha ido asesorando al Gobierno sobre cuál es esa referencia del 60% año a año, con alguna excepción.
En la comisión están presentes expertos independientes, así como miembros de varios ministerios económicos (Trabajo, Economía y Hacienda) y de los sindicatos mayoritarios (CCOO y UGT), mientras que la patronal CEOE se negó a formar parte del grupo.
Pelea de estadísticas
Los empresarios denuncian ahora que el salario mínimo está “sobredimensionado” porque critican la estadística con la que el comité de expertos ha venido estimando cuál es el salario medio del país, la Encuesta de Estructura Salarial (EES) del INE.
Se trata de una de las diversas fuentes estadísticas oficiales sobre salarios que tiene España, la que se suele considerar como la más completa y que ofrece más nivel de detalle, pero que tiene algunos inconvenientes –como reconocían los propios expertos en su primer análisis–, como que no incluye algunos sectores, caso del primario y el empleo doméstico, y que tiene más retraso en la publicación de resultados.
La patronal defiende que habría que utilizar la información sobre salarios que ofrece otra estadística del INE, la Encuesta de Población Aciva (EPA), que sí incluye estos sectores excluidos en la EES, muy afectados por el salario mínimo, y que tiene resultados más recientes (2024 frente a 2023). De ella, además, resulta un dato de salario medio bastante inferior y, en consecuencia, también un SMI más bajo.
“En cifras, el SMI, tomando los datos EPA como referencia para 2025, sería de 15.760 euros brutos anuales, esto es, 816 euros menos al año. Dicho de otro modo, el SMI sería en estos momentos un 4,9% superior a lo que realmente corresponde”, dicen los empresarios. Con la referencia de la patronal, el SMI sería de 1.126 euros al mes en 14 pagas.
Sin embargo, la estadística de salarios de la EPA que plantean los empresarios también tiene sus inconvenientes, como reflejó la comisión de expertos del Gobierno. De las más destacadas, que tiene una muestra mucho más pequeña que la Encuesta de Estructura Salarial. Esta última ofrece una imagen mucho más amplia de lo que ganan las personas asalariadas. Según los últimos datos disponibles, la muestra de salarios de la EPA alcanza a 27.000 asalariados, frente a los 250.000 de la Encuesta de Estructura Salarial.
El líder de los empresarios ha concluido así este miércoles que “parece ser que se ha elevado el SMI bastante por encima de lo que debería ser” y ha denunciado que “se juega con estadísticas que no son las que habría que trabajar”.
No obstante, Garamendi ha dicho que la patronal ha planteado la “más que generosa” propuesta de incremento del 1,5% del salario mínimo en 2026 para que “por lo menos sea la que se ha planteado con los funcionarios”.
Por su parte, los sindicatos han planteado que el SMI suba un 7,5% y el Gobierno, que no ha adelantado aún su postura a la espera del informe de los expertos, se inclina por una nueva alza relevante, según han expresado varios ministros.
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