El Gobierno se compromete con Bruselas a rebajar el gasto público y subir los impuestos en 2022
El Gobierno ha remitido este viernes a la Comisión Europea el Plan Presupuestario de 2022 en el que anuncia una rebaja del gasto público y una reforma del sistema tributario español “de modo que no frene la recuperación económica, pero permita aproximar progresivamente los ingresos tributarios hacia la media de los Estados miembros, para proteger el Estado de bienestar, así como hacer frente al déficit estructural de nuestro país”.
El Ejecutivo mantiene su previsión de que el producto interior bruto (PIB) del país se expandirá un 6,5% este año y un 7,% en 2022.
El Gobierno recuerda a Bruselas que puso en marcha un comité de personas expertas para la reforma fiscal que publicará sus conclusiones en febrero de 2022, con el objetivo de conseguir “la consolidación fiscal, la seguridad jurídica, la simplificación y modernización del sistema, la potenciación de la fiscalidad en áreas infragravadas”.
El Ejecutivo explica que con esta reforma impositiva “se requiere mejorar la recaudación y la eficiencia del sistema fiscal a través del ensanchamiento de las bases tributarias reducidas por las numerosas exenciones y deducciones, evaluando si los beneficios fiscales existentes logran los objetivos para los que fueron creados, o si deben revisarse. Asimismo, deben analizarse en profundidad las figuras tributarias actuales para adaptarlas al contexto económico, y avanzar en la incorporación de nuevos tributos de acuerdo con las tendencias más recientes”, en referencia a los impuestos ecológicos y digitales.
Respecto al gasto público, el documento señala mientras que en 2021 creció el 1,1%, “si bien en 2022 registraría un crecimiento negativo del -1,8%”, con la argumentación de que “la caída proyectada en el gasto público nominal neto computable se debe tanto a la evolución del gasto total de las Administraciones Públicas como a otros factores entre los que cabe destacar el aumento de las medidas discrecionales de ingreso previstas para 2022”. Esa evolución del gasto de las Administraciones tendría una sensible reducción cuando las medidas del escudo social y sanitarias provocadas para luchar contra la pandemia de la Covid ya no son necesarias.
De esta manera, el Plan Presupuestario prevé que su peso sobre el PIB “baje hasta el 44,7% en 2022 desde el 49,6% previsto en 2021 y el 52,4% alcanzado en 2020 por la fuerte caída de la economía que provocó la pandemia y las medidas de apoyo a familias y empresas que adoptó el Gobierno para mitigar las consecuencias de la recesión”.
El Plan Presupuestario de 2022 recoge que los ingresos totales del conjunto de las Administraciones Públicas supondrán un 39,8% del PIB. En términos de volumen, los ingresos ascenderán a los 522.264 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 4,6%. En la medida en que el crecimiento de la economía será superior a la recaudación, la ratio de ingresos sobre PIB se reduce respecto a 2021, cuando se situará en el 41,3%.
Con estas medidas el Ejecutivo de Pedro Sánchez trata de mantener el compromiso con Bruselas “de estabilidad presupuestaria, a pesar de que persiste la suspensión de las reglas fiscales en España, en línea con la decisión de la Comisión Europea de mantener activa la cláusula de salvaguarda con objeto de dar margen a los Estados para que prosigan con sus políticas de apoyo a la economía hasta que la recuperación se asiente.
En el Plan Presupuestario se apunto que “desde el 11% de déficit de 2020, se prevé que en 2021 baje hasta el 8,4%, y hasta el 5% en 2022”, una reducción que continuará en 2023 y 2024, ejercicios en los que bajará hasta el 4% y el 3,2%, respectivamente.
5