La unión de la inserción laboral con la economía verde
La mejora del entorno en el que se vive permite múltiples iniciativas. Hacer del medio físico un sitio mejor y conseguir que la comunidad humana que se inserta en ese medio también camine hacia objetivos de igualdad y respeto son dos vías habituales en las que se embarcan los emprendedores sociales. Ambas facetas pueden apoyarse mutuamente.
El asociacionismo ha jugado un papel fundamental a la hora de combatir ciertos problemas sociales que se hallaban algo abandonados en momentos virulentos. La drogadicción fue uno de ellos. Pero, una vez -o más bien al mismo tiempo- que se trabaja en esa dirección, los que estaban a pie de calle se han ido dando cuenta del siguiente capítulo: no se puede limitar la acción a la primera trinchera del consumo. Porque después ¿qué hay?
Para dar respuesta a esa incógnita, una asociación de lucha contra la drogadicción extremeña Alucod, pensó en utilizar otra de sus preocupaciones “el medio ambiente”, para dar continuidad a su acción pero desde el siguiente escalón: insertar laboralmente a personas en riesgo de exclusión (esa materia con la que ya se desenvolvía) pero con perspectiva empresarial y dentro de la economía verde. De esa manera, hace dos años (en 2011) y “fruto de esta preocupación y de la necesidad de potenciar la inserción laboral de nuestros usuarios surge ALUCOD RECICLAJE”. La empresa está dedicada a la “recogida, clasificado y venta de papel y cartón y a la destrucción de documentación confidencial”, explican desde el proyecto. La iniciativa trata de convencer al mundo corporativo de que la cantidad (en muchas ocasiones ingente) de papel que se genera en su día a día puede terminar de nuevo en sus manos “en estos tiempos en los que el respeto a la ecología y el medioambiente es un requisito a tener en cuenta por cualquier empresa que busque trabajar con un sistema de calidad y que se preocupe por desarrollar una responsabilidad social”.
Alucod explica su dinámica de funcionamiento: “Nos encargaremos de colocar contenedores en sus instalaciones, recoger el papel con la frecuencia que necesite y hacer todo ello de una forma eficaz y económica”. Además también actúan en el ámbito de la documentación confidencial sujeta a protección que manejan las empresas. “Hacemos que se cumplan todas las exigencias legales a la hora de destruirla, recogiendo esos documentos en su domicilio y sometiéndolos a un proceso de destrucción bajo las máximas medidas de seguridad y discreción, emitiendo finalmente un certificado que le garantice que efectivamente ese papel ha sido eliminado”.
En su trayectoria, Alucod Reciclaje ya ha sido reconocida por la Junta de Extremadura como Empresa de Inserción. Para ellos es un “hecho relevante al ser los primeros en obtener esta calificación en Extremadura, con el reconocimiento que esto supone para una entidad dedicada a trabajar con colectivos en riesgo de exclusión ya que buscamos facilitar el mayor número de contratos de inserción a personas vulnerables”. Este sector novedoso empieza a mover cifras entorno más de 4.500 personas empleadas, y facturación de 83 millones de euros anuales en toda España según la Federación de Asociaciones Empresariales de Empresas de Inserción.
La secuencia emprendedora es, pues, la siguiente: una labor meramente social como es la ayuda a los drogodependientes encuentra una vía de acción como es la inserción laboral que, además, se puede realizar mediante un sector también propicio al emprendimiento social como es la economía del respeto al medio ambiente. Carretera de doble vía que, como las propias autopistas, favorece la aceleración.
Alucod reciclaje recibió el X Premio de Inserción Mediante el Emprendimiento Verde del Ciade de la Universidad Autónoma de Madrid.
