La Formación Profesional relacionada con el desarrollo de aplicaciones dispara las tasas de empleabilidad
En España se ha apostado tradicionalmente por la universidad como única vía de estudios posobligatorios, una opción que parecía casi incompatible con otros itinerarios académicos hasta hace poco. Sin embargo, en los últimos años, esta situación ha ido cambiando progresivamente gracias al prestigio adquirido por la Formación Profesional, derivado del esfuerzo de sus docentes, el éxito de sus estudiantes y la apertura de miras de los responsables políticos. Tanto es así, que hoy se acepta con normalidad la posibilidad de estudiar primero un ciclo de FP y luego una carrera universitaria o viceversa.
Para potenciar esta rama formativa, el Ministerio de Educación ha perfilado una nueva Ley de Formación Profesional, que ya cuenta con la reciente aprobación del Consejo de Ministros. El objetivo, tal como indican fuentes ministeriales, es acercarla más a la empresa y que el alumnado la tenga como una referencia, al igual que sucede en el resto de Europa. Pero, al margen de este nuevo impulso, lo cierto es que la FP ya presenta números impresionantes en la actualidad, “con un grado de empleabilidad altísimo”, ya que ronda “el 90%”, aseguran desde Educación.
También el empleador tiene claro su potencial: según un informe publicado por Edix, el Instituto de Expertos Digitales de UNIR (Universidad Internacional de La Rioja), “más del 80% de empresarios en todos los sectores y tamaños de pymes afirma que es una buena opción para las profesiones de futuro”. Un ejemplo de ello es Héctor Paz, CEO y cofundador de Imascono, firma aragonesa de base tecnológica. Desde su punto de vista, “los estudiantes de FP tienen conocimientos específicos y una perspectiva muy cercana al mercado; conocen los procesos y el software que utilizan las compañías hoy en día”. Este joven emprendedor, que además es docente universitario, corrobora la compatibilidad que existe entre ambos tipos de formación: “FP y universidad tienen cabida en un mismo estudiante y no tienen por qué ser excluyentes”.
En esta dirección, otro estudio sociológico igualmente elaborado por Edix recoge que “la FP sería la opción elegida por más de un 90% de los encuestados y se plantea como opción complementaria a otras formaciones, así como una herramienta de reinvención laboral”. Tal es el caso de Cristian Fernández, alumno online del propio Instituto de Expertos Digitales de UNIR, quien admite que comenzó a estudiar durante los meses más duros de la pandemia para reciclarse. “Procedía del sector inmobiliario y el entorno comercial y, tras cursar el primer año del ciclo de Técnico Superior en Desarrollo de Aplicaciones Multiplataforma (DAM), ya estoy trabajando en el entorno tecnológico”, confirma.
Cristian coincide en que la FP ofrece “rápidas y buenas salidas laborales” y detalla que, en el sector informático-digital, “en LinkedIn e InfoJobs hay tantas ofertas que las empresas te buscan a ti, no tú a ellas”. “Creo que es una apuesta sobre seguro, tanto para profesionales que deseen reinventarse, como para jóvenes que no sepan qué estudiar, todavía más en estos tiempos en los que la digitalización continuará creciendo”, subraya.
Los ciclos tecnológicos: una mina de empleo
Los itinerarios de FP se agrupan en familias y una de ellas, concretamente la relacionada con la digitalización, es en estos momentos la formación más requerida por las compañías. Tan urgente es la necesidad de las empresas que, según el mapa de Empleo de Telefónica, perfiles como desarrollador web y multimedia están entre los tres más requeridos en España, con 8.000 ofertas de trabajo en los últimos tres meses. Del mismo modo, en InfoJobs este perfil está en pleno auge, hasta el punto de multiplicar por 17 su demanda reciente.
Ante un incremento tan notorio en la búsqueda de estos perfiles, los centros de Formación Profesional de corte tecnológico han comenzado a especializar más a sus alumnos y alumnas. “En lo que se refiere a ciclos oficiales, hay tres concretos en el top: Desarrollador de Aplicaciones Multiplataforma (DAM), Desarrollador de Aplicaciones Web (DAW) y Administración de Sistemas Informáticos en Red (ASIR)”, destaca Ascensión Blázquez, directora del Instituto tecnológico de Edix. “Dado que la mayor demanda está relacionada con las competencias digitales —continúa— hemos comenzado a ofrecer titulaciones únicas dentro de nuestro plan de estudios y que cuentan con el reconocimiento de un diploma universitario avalado por UNIR, se trata de MEAN Stack en el caso de DAW y DevOps en el caso de DAM”.
Asimismo, Ascensión Blázquez concreta que los estudiantes pueden especializarse mediante otras opciones, como son los denominados Máster FP, “cursos orientados a personas tituladas igual de intensos que los posgrados universitarios, pero más breves en el tiempo”. La directora de Edix señala que su centro ofrece este tipo de formación, en este caso centrada en ciberseguridad, inteligencia artificial y big data.
Blázquez reconoce que la edad media del alumnado de los ciclos 100% online que ofrece Edix está en torno a los 31 años porque “es una excelente opción, no solo para los jóvenes que acaban de terminar el instituto, sino también para los profesionales que necesitan un reciclaje laboral”. En la misma línea, asegura que “la gran ventaja de la FP” es que “está orientada a lo que necesitan las compañías” y esto “garantiza la empleabilidad”. “En este sentido, nuestros títulos han alcanzado tasas del 85% de estudiantes trabajando, una vez han realizado las prácticas”, concluye.