Hay dos maneras de enfrentarse al nuevo disco de Volbeat: una es escucharlo con orejas abiertas, entendiendo que es el resultado de su evolución como grupo. Y la segunda es desconfiar de su cambio musical con las acusaciones de siempre. Sí, las que antes tuvieron que aguantar Metallica, Megadeth y otros tantos. Yo opto por la primera. Estoy seguro de que por cada fan que se pueda sentir decepcionado, Volbeat ganarán otros dos.
Lo primero que destaca de este “Seal the deal & let’s boogie” es que completa un giro hacia la melodía iniciado con su anterior disco. Por una parte, pesa más la construcción de canciones con gancho y estribillos pegadizos que las guitarras más metaleras; y por otra, vemos a un grupo absolutamente consolidado, que ha logrado perfeccionar la fórmula del éxito y su conexión con los seguidores. Ya sabemos lo que se puede esperar de Volbeat si les conocíamos de antes, pero quienes los escuchen ahora por vez primera con atención se toparán con un grupo fresco y directo.
Tengo la impresión de que los daneses han fijado su objetivo en el mercado americano. El fichaje de Robb Caggiano desde las filas de Anthrax les abrió una enorme oportunidad para hacerse conocidos en los Estados Unidos, y la influencia de este en las composiciones parece cada vez mayor. Además, Poulsen y Larsen estabilizan definitivamente la formación con la entrada como bajista permanente de Kaspar Boye Larsen. Es decir, son un equipo y tienen claras cuáles son sus metas. Así que en su música no hay rodeos.
Si por algo sobresalen Volbeat con respecto a otras bandas de Metal es por su originalidad. Han creado su propio género, el Elvis Metal, y saben explotar sus cualidades. La principal, además de un ADN musical único, es que sus canciones transmiten algo. En algunos momentos, ganas de fiesta, en otros, emociones y sentimientos. Y casi siempre, ganas de cantar sus estribillos en alto. En esta sexta entrega de estudio vuelven a contar con invitados ilustres, como Danko Jones en una genial pieza titulada “Black rose”, y Johan Olsen de los daneses Magtens Korridorer. Además, incluyen una versión dedicada a un amigo fallecido que es “Rebound”.
El inicio lo componen tres temas típicamente marca de la casa, que enseguida estarás tarareando, pero en los que se notan unas guitarras menos musculosas que de costumbre. La segunda fase es todavía más melódica con “The gates of Babylon” y “Let it burn”. Sin embargo, a veces vuelven los sonidos más pesados. Es el caso de la excelente “Seal the deal” que por algo da título al disco. El conjunto es redondo, equilibrado y, lo más importante, tiene sentido y lógica. Debían evolucionar y lo han hecho. Creo que para bien. Ahora habrá que ver cómo responde este material trasladado al directo. Este verano podremos verles en el Resurrection Fest de Lugo, aunque algo me dice que no será la única oportunidad que tendremos de verles por aquí cerca. Mientras, siguen trabajándose los Estados Unidos. Creo que allí también llegarán a ser grandes.
En definitiva, un grupo que desde 2005 ha publicado seis discos en estudio y uno en directo es un grupo que tiene cosas que decir. Sus guitarras son un poco menos cañeras ahora, la estructura de los temas responde a un esquema predecible, pero a veces en la sencillez está el secreto. Ni son ampulosos ni te van aburrir con enrevesados solos. Volbeat son un grupo para disfrutar de la esencia del Rock: amigos, unas cervezas y ganas de cantar y pasarlo bien. Ahí tienen pocos rivales. Si fuera tan fácil lo harían todos.
Sobre este blog
Soy Dani Álvarez, presento y dirijo cada mañana Boulevard en Radio Euskadi entre las 6 y las 10 de la mañana. A los 12 años escuché por primera vez a Iron Maiden y me dije “esto es lo mío”. Desde los 22 busco y cuento noticias, y a todas horas escucho Metal. He entrevistado a más lehendakaris (5) que veces he visto a Metallica o he ido a Wacken (4). Decir más sería reiterativo.
