La pandemia se dispara en Euskadi: más de 800 casos en 24 horas y 46% de crecimiento en Bizkaia en siete días

Una semana después de que se lanzaran mensajes de repunte “contenido” o de que no había motivos de “alarma extraordinaria”, la pandemia se dispara en Euskadi. Este martes se han notificado 817 nuevos positivos de COVID-19 (con una positividad próxima al 7%), el peor dato diario desde el 20 de noviembre. De ellos, 492 se concentran en Bizkaia donde el municipio de Muskiz salta de golpe de alerta amarilla a roja por el gran brote de 115 casos en la residencia Marcelo Gangoiti, 93 mayores y 22 trabajadores. El portavoz del Gobierno, Bingen Zupiria, ha admitido el contexto de “incertidumbre” en que se halla la situación de la pandemia, aunque ha señalado “en general”, en Navidad, la sociedad vasca ha cumplido las normas y “no se ha divertido más de lo que debiera”, parafraseando a Fernando Simón.

La tasa de incidencia (casos en 14 días por cada 100.000 habitantes) continúa su escalada y llega ya a 326, con los tres territorios en niveles muy similares aunque la cadena de contagios crece a un ritmo del 46% semanal en Bizkaia, al 23% en Gipuzkoa (con 219 nuevos contagios) y al 13% en Álava (92). La transmisibilidad se halla también en niveles de riesgo alto, con un R0 de 1,38 en Bizkaia y del 1,25 de media en Euskadi. Este indicador muestra los contagios que origina cada positivo y cuando se sitúa por encima de 1 indica que la pandemia se está expandiendo. El R0 ha alcanzado ya niveles similares a los del pico de la segunda ola. En cuanto a la incidencia por edades, la más afectada son los mayores de 80 años, justamente donde la letalidad es más alta. Junto a la franja de los 65 a los 79 años es el grupo en el que también crece la positividad de una manera más acelerada.

A nivel más local, la COVID-19 deja en alerta naranja por alta transmisión a Bilbao y Vitoria y en nivel amarillo a Donostia. Son 10 las localidades de más de 5.000 habitantes en Euskadi en nivel rojo y, con las nuevas medidas previstas, quedarán confinadas perimetralmente y en ellas no habrá ni hostelería ni posibilidad de hacer deporte. En el caso de las más pequeñas con muchos casos, el análisis será diferente, teniendo en cuenta también la evolución de su comarca sanitaria y sus circunstancias particulares. Ya no queda ningún municipio con la tasa que se considera óptima, con menos de 60 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días.

En cuanto a la situación hospitalaria, los ingresados crecen hasta 420, cuando eran 363 hace dos semanas. En las últimas 24 horas 45 personas han sido hospitalizadas. En la UCI hay 75 pacientes en estado crítico, aunque la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, ha admitido que se excluye de ese recuento a quienes dan negativo incluso aunque continúen en cuidados intensivos por los problemas respiratorios originados por el Sars-Cov-2. No hay datos de fallecimientos, ya que Osakidetza únicamente ofrece este dato una vez por semana.

Ante este contexto, el portavoz del Gobierno ha insistido en defender el ritmo de vacunación que lleva Euskadi, que incluye una reserva por sistema del 50% de las dosis que llegan para garantizar la segunda dosis a quienes reciben la primera en caso de que se corte el suministro. Es “lo que mejor se ajusta” a las características técnicas del producto que se usa, de la casa Pfizer. El compromiso que se “cumplirá” en enero es el de que 20.000 mayores y trabajadores de residencias tengan la pauta completa. Euskadi espera también recibir en los próximos días las primeras remesas de la vacuna de Moderna.