Archivan una denuncia contra el ‘número 2’ de Educación al no haber indicio de delito
La Audiencia de Badajoz ha archivado, en contra del criterio del fiscal, una denuncia contra el secretario general de la Consejería de Educación, César Díez Solís, por un presunto delito de falsificación de documento público al entender que, además de carecer de base objetiva, no existe indicio alguno delictivo en los hechos expuestos.
La denuncia está “huérfana de fundamento”, añade el auto emitido por el Tribunal de la Sección 3 de la Audiencia Provincial de Badajoz, con sede en Mérida.
Díez Solís, así como la delegada del Área en Badajoz, Concepción Cajaraville, y una asesora de la Consejería, que no llegaron a declarar, fueron denunciados por un presunto delito de falsificación de documento público en el marco de unas diligencias abiertas a raíz de una denuncia presentada por dos jefes de servicio que son matrimonio y fueron destituidos.
Conocimiento del expediente
La denuncia se basaba en que durante el procedimiento de privación de plaza escolar a su hija –por falsificación de documentos— Solís y Cajaraville dijeron que se les había comunicado el expediente pero los jefes de servicio sostenían lo contrario.
Tras el escrito de inicio remitido al Juzgado de Instrucción 4 de Mérida, las tres personas denunciadas interpusieron un recurso de apelación contra acuerdo de incoación del procedimiento.
El auto de ahora que archiva el caso, y que no puede ser recurrido, señala que de la relación de hechos denunciados “no se deduce ninguna conducta que haya de ser perseguida penalmente”, sin perjuicio de que puedan juzgarse por la vía contencioso-administrativo o incluso civil.
“No se aprecia atisbo alguno de que los hechos recogidos en la denuncia tengan base alguna objetiva que implique un comportamiento siquiera indiciariamente delictivo”, afirma el Tribunal. Además, añade que “sostener una especie de confabulación de los denunciados con ese propósito -generar y alimentar sospechas- sin una base fundada sobrepasa lo aceptable”.
