Declaran el acuífero de Tierra de Barros en mal estado, por nitratos y sobreexplotación
Como adelantó eldiarioex a principio de julio pasado, corre peligro de agotarse y además los niveles de nitratos superan lo recomendable, según la normativa establecida en la Ley de Aguas y el Plan Hidrológico de la cuenca.
A partir de ahora se constituirá una comunidad de usuarios responsable de un plan de explotación, formada por agricultores, industriales, ayuntamientos y demás beneficiarios; en cuanto a las captaciones todas deberán poner un contador, que cuesta entre 300 y 1.000 euros según el diámetro de la captación.
El objetivo es que entre todos los usuarios no saquen más agua de la que el acuífero es capaz de reponer, y en cuanto a los nitratos, de acuerdo con la Consejería de Agricultura se establecerá un plan relativo al uso de abonos.
La consecuencia más rápida es que Confederación ya no otorgará más derechos de extracción, y que incluso podría limitar aquel que concede automáticamente al dueño de cada parcela u uso de 7.000 metros cúbicos/año, explica el comisario de aguas del Guadiana, Timoteo Perea.
Los derechos al uso de las aguas subterráneas inscritos en esta zona han ido incrementándose progresivamente, cifrándose en la actualidad en 25,9 hectómetros cúbicos/año, una cifra superior a los recursos máximos disponibles que establece el plan hidrológico de la cuenca.
En función de lo anterior, el plan hidrológico del Guadiana establece “el mal estado cuantitativo”, y por otro lado igualmente el “mal estado químico”, debido a la presencia de elevados contenidos en nitratos, que superan los límites de la legislación nacional y comunitaria sobre abastecimiento humano y la directiva marco de aguas.
Se suspende el derecho para la apertura de nuevas captaciones y no se otorgarán autorizaciones sobre los mismos.
También se ha decidido paralizar todos los expedientes de autorización de investigación o de concesión de aguas subterráneas dentro de la masa de agua, así como todos los expedientes de modificación de características de las concesiones de aguas subterráneas que se encuentren en tramitación, aunque establece algunas excepciones.