Los gladiadores extremeños, en el renacer romano de la onubense Aroche
Turóbriga fue una ciudad romana asentada en el actual término municipal de Aroche (Huelva). Este fin de semana, como si el tiempo no hubiera pasado, ha renacido en el yacimiento arqueológico en el que se conservan sus restos gracias a la celebración del Festival de Diana, que incluye la participación de Emeritae Lvdvs Gladiatorvm, grupo de Mérida que recrea la lucha de gladiadores.
Esta cita, que desde hace tres años viene organizando cada verano el Ayuntamiento de Aroche, rinde honor a la Diosa Diana, representante de la caza y la naturaleza, presente en el yacimiento arqueológico de Arucci Turobriga.
El domingo abrieron las puertas de esta importante ciudad creada a finales del siglo I A.C. en época de Augusto, y los visitantes pudieron conocer de primera mano cómo vivían sus habitantes gracias a figurantes, muchos de ellos vecinos que han recreado escenas cotidianas de la vida de esta urbe.
A estas visitas guiadas se ha sumado la ermita medieval de San Mamés, una joya histórico-artística construida sobre los restos de la basílica romana, además de actividades complementarias posteriores a la visita como actuaciones musicales, teatro clásico o contemplación de estrellas.
Fuera del perímetro de Turóbriga el Festival comenzó con actividades en el Museo-Convento de la Cilla y el pasacalles de recreacionistas históricos desde el castillo a la Plaza Juan Carlos I.
Ya por la tarde en el yacimiento, tras su apertura y antes de las visitas guiadas, tuvo lugar el espectáculo de gladiadores a cargo del grupo de Mérida Emeritae Lvdvs Gladiatorvm y posteriormente el de 'Las Tres Caras de Hécate' por Ara Concordiae.
Las actividades se completaron con una contemplación de estrellas, “El Cielo Mitológico”, a cargo de Engranajes Ciencia, poco antes de la media noche.
Turóbriga estuvo habitada hasta principios del siglo III d.C., en época de Los Severos, momento en el que fue definitivamente abandonada para servir de cantera para la construcción de nuevas villas rústicas y la ampliación de otras existentes, así como para la construcción del castillo de Aroche y la ermita de San Mamés.