El concejal de Vox en Mérida que equiparó homosexualidad y pedofilia abandona la política
Desde el inicio de la legislatura, Vox ha conseguido que la política municipal de Mérida salte a los titulares nacionales, aunque más por los exabruptos de sus concejales que por la medidas que han planteado. Uno de esos integrantes ha anunciado este lunes que abandona la política a los siete meses de convertirse en edil.
Francisco Piñol, que consiguió cierta popularidad tras sus polémicas palabras al equiparar la homosexualidad con la pedofilia durante la celebración del Orgullo en la capital extremeña y tras criticar la acogida de inmigrantes procedentes de Canarias, ha decidido dar un paso al lado desencantado con la vida municipal. El que fuera número dos del partido de extrema derecha deja paso a la siguiente integrante en la lista, Margarita Inmaculada López de Ayala y Díez de Rivera.
Piñol ha admitido en la que ya es su última intervención en el pleno que es “poco sociable”, por lo que es incapaz de “desempeñar bien” las funciones como edil: “Llevo 33 años en Mérida y no conozco la ciudad. No soy una persona que se haya dado a la sociedad”, ha dicho.
El edil ultra se ha marchado con una crítica a la política municipal, motivo de la “desilusión” de su corta vida en el ayuntamiento emeritense: “El momento actual de España tendría que obligar a que una parte [de los plenos] se dedicara a la unidad de España. Si España se rompe, y es muy factible, Mérida ya no va a formar parte de España”.
Aunque Piñol había admitido minutos antes, y a pesar de sus funciones como representante municipal, no estar en contacto con los vecinos por ser un “individuo solitario”, en su despedida ha asegurado que los ciudadanos “no entienden que nos quedemos en el estado de las aceras y los pasos de cebra cuando nos jugamos algo que es más importante y nunca hablamos de eso”. De hecho, el concejal de Vox ha intentado en varias ocasiones introducir en el turno de ruegos y preguntas asuntos del ideario de extrema derecha relacionados con la política nacional y se ha encontrado de frente al alcalde, Antonio Rodríguez Osuna, que le ha recordado que no estaba cumpliendo con el reglamento.
“Quédese usted tranquilo que aquí estamos nosotros, los socialistas, para defender la unidad de España”, le ha dicho Rodríguez Osuna antes de despedirle ante la insistencia de Piñol sobre el asunto.
“Por Dios y la patria”
Francisco Piñol, médico jubilado, consiguió su acta de concejal tras las elecciones municipales de 2023 y en tomó posesión de la misma jurando “por Dios y por la patria”. En uno de sus primeros plenos, a finales de junio, exigió la retirada de la bandera con los colores LGTBI de la fachada del ayuntamiento porque, a su juicio, no se cumplía con una sentencia del Tribunal Supremo “y lo que marca la Constitución”. “Si nos seguimos saltando la ley, lo siguiente que vamos a ver es la bandera de los pedófilos y vuestros hijos y mis nietos pueden estar metidos en eso”, dijo directamente a los concejales socialistas del equipo de gobierno durante su intervención.
En octubre volvió a enfrentarse al alcalde al insinuar que tenía “un interés propio” en la acogida de inmigrantes procedentes de Canarias. El concejal de extrema derecha acusó a Rodríguez Osuna de hacer un llamamiento para que “vengan todos los parias de la Tierra” al poner a disposición del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones el antiguo albergue para recibir y atender a estas personas. Piñol llegó a hablar de “esas invasiones de gente” y de la “destrucción” de España por la “inmigración masiva”.
El alcalde de Mérida le acusó de ser un “nostálgico de las dictaduras de Franco y Videla” y subrayó que trabajará “firmemente” para que en las próximos elecciones municipales el partido de Santiago Abascal no consiga ningún concejal.
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