Acabar con las contratas privadas de limpieza es inviable ahora según la Junta

Casi todas estas empresas que tienen subcontratas con la administración mantienen conflictos laborales. Bien porque pagan con retraso a las personas empleadas, o por sus condiciones laborales. Algo que repercute directamente en el servicio que se ofrece a la ciudadanía.

Este es el argumento básico que trasladó el diputado de Podemos, Obed Santos, a la hora de presentar en la Asamblea una propuesta de impulso que instaba a la Junta a solucionar los conflictos laborales de estas personas, además de poner en marcha un proceso de recuperación de la gestión pública directa de estos servicios.

La propuesta, rechazada con los votos en contra de PSOE y PP --y la abstención de C`s--, proponía subrogar al personal que los realiza, para que una vez recuperados los servicios por parte de la administración fueran las mismas personas empleadas las que ejercieran este servicio.

La medida contó con el rechazo absoluto del PP, que llegó a acusar a la formación morada de haber copiado el texto de la propuesta de otra que presentó Bildu en el Ayuntamiento de Barakaldo (“bonito referente”, espetó la diputada del PP popular). También que “no se puede mantener lo público, arruinando lo privado”, y que “la gestión directa es propia de países como Venezuela o Cuba”.

Una postura diferente mostró el PSOE, que dijo que compartía la necesidad de dignificar las condiciones laborales de todos los empleados y empleadas. Según dijo la diputada Estrella Gordillo de ello se encargarán las cláusulas sociales, según las cuales tendrán prioridad en las adjudicaciones las empresas adjudicatarias que favorezcan por ejemplo la conciliación de la vida laboral y familiar de sus empleados, o potencien su formación contra los accidentes y enfermedades de trabajo, entre otras cuestiones.

En cuanto a la recuperación de la gestión pública directa de los servicios privatizados, la diputada trasladó a Podemos que es inviable, y “ustedes saben que es inviable en el contexto actual”.

“Un sector muy precarizado”

Para Podemos el sector de la limpieza es un servicio que “deja mucho que desear”, no por culpa de las empleadas sino por falta de recursos humanos y material en lugares como los hospitales o el SEPAD. Personas que soportan a sus espaldas situaciones en las que no se les paga, o se hace con retraso, a lo que se une –dijo-- que otras son despedidas por pedir simplemente que se cumplan las cláusulas de los contratos.

Unos empleos mayoritariamente femeninos, que suponen un “ataque a los derechos de los trabajadores” mientras que siguen las “presiones de las grandes empresas para hacerse cargo de los servicios púbicos”. Comentó así Obed Santos que hay dirigentes del PSOE, en ciudades como Jaén, que están proponiendo retomar los servicios públicos de limpieza “porque son entre un 40 y un 70 por ciento más baratos que los servicios externalizados”.

También que no proponen que se corte de manera drástica la subcontrata, sino que cuando se vayan terminando las concesiones actuales se ponga en marcha un proceso de recuperación de la gestión pública directa—no indirecta—de los servicios de limpieza privatizados de las distintas consejerías de la Junta de Extremadura, organismos autónomos y demás entes como medida de ahorro y de las condiciones de trabajo“.

Sería posible a su juicio bien con la creación de una empresa pública que lo realice, o encargarlo a GPEX, subrogando al mismo tiempo a todos los empleados, para que fueran ellos quienes entraran a trabajan directamente para la Junta.

“No supondrá un ahorro”

Por parte del PP la diputada Pérez Zamora preguntó a Podemos qué idea tienen ellos de la gestión pública, o cuándo han gestionado ellos lo público. A paso seguido argumentó que “ni mucho menos está claro que la reversión vaya a suponer una medida de ahorro, es más, es que es todo lo contrario”.

“¿Me quieren explicar cómo va a soportar la administración este gasto de personal? ¿Cómo incorporamos ese gasto de personal al capítulo 1 de los presupuestos? ¿Qué impuesto tienen ustedes pensado subir para poder soportar este gasto?”, añadió.

Dijo también que si los contratos revierten a la administración, “el coste que ello supondría sería inasumible por la Junta de Extremadura”, así como que en ayuntamientos como el de Madrid, Manuela Carmena “ha reconocido que no puede revocar el servicio de la limpieza externa porque es inviable la reversión de los contratos tanto por motivos económicos como por motivos jurídicos”.

Añadió que “está claro que hay conflictos laborales”, aunque ante estos los responsables de la Junta de Extremadura “tendrán que mediar para solucionarlos, de que se cumple todo lo estipulado en el contrato y de que no está produciendo ninguna irregularidad ni vulnerando ningún derecho de los trabajadores”. En cuanto a la subrogación del personal, que estas personas tendrían que pasar en este supuesto por una oposición, para no vulnerar el principio de igualdad.

“Hay que dignificar a las empleadas”

Por parte del PSOE, Estrella Gordillo trasladó que los socialistas comparten plenamente la postura de dignificar el trabajo de los empleados de los servicios subcontratados.

Dijo no obstante que el Ejecutivo de Fernández Vara está aplicando las cláusulas sociales a todas las licitaciones públicas, ya se ha hecho con el servicio de limpieza del Hospital de Coria, mientras que hay cuatro licitaciones en marcha donde también van incluidas las cláusulas sociales. “Muchos trabajadores tienen muchas dificultades por las empresas concesionarias y por eso vamos a trabajar. Lo más fácil sería reducir la contratación pública a criterios numéricos, al dinero, como pasó con el anterior gobierno”.

Comentó igualmente que las clausulas sociales buscan la promoción y la consolidación de un tejido empresarial sostenible, teniendo en cuenta el papel de las empresas privadas de la calidad de vida de los ciudadanos. “Tengan la garantía de que la contratación pública se ponga al servicio de la ciudadanía, contra el desempleo y la baja calidad”, añadió.