El SES dice que es imposible saber la deuda que se generó por el exceso de copago
El director gerente del Servicio Extremeño de Salud (SES), Ceciliano Franco, ha dicho que es “imposible saber” la deuda exacta que se generó a los pensionistas por exceso de copago y ha reconocido que “tristemente” no todos los usuarios van a poder cobrarlo.
Ceciliano Franco ha comparecido ante la Comisión de Sanidad, Políticas Sociales y Vivienda de la Asamblea de Extremadura, para responder a una pregunta del diputado del PP José Ángel Sánchez Juliá sobre la situación en la que se encuentra la gestión del copago farmacéutico.
Franco ha reconocido que “sólo existe certeza” de la deuda generada por el Gobierno extremeño de cinco millones y medio de euros correspondientes a la facturación por receta electrónica y de la facturación de las más de 5.000 reclamaciones que se han hecho, todo ello correspondiente al periodo de julio de 2012 a octubre de 2013.
En ese periodo, según ha precisado, se generaron 26,3 millones de recetas electrónicas, que son sobre las que existe certeza, pero además hay 6 millones de recetas manuales y que no están tramitadas informáticamente, por las que se pudieron generar al menos 1,3 millones de exceso de copago.
Retrasos en el pago
El director gerente del SES ha recordado que a pesar del procedimiento de devolución establecido, en un periodo fijado de cada seis meses, tres años después ahora todavía se están abonado casi 800.000 euros pendientes de devolución.
De este total, según ha explicado, a más de 1.000 perceptores se le deben más de 150 euros y a 4.000, entre 50 y 150 euros; mientras que a seis se les adeudan cantidades superiores a los 600 euros; y a más de cien, entre 300 y 600 euros.
“Son cantidades importantes que están estancadas al menos desde octubre de 2013”. Así ha apuntado en que el problema está “en las recetas que no están facturadas como electrónicas y que tenían que ser reclamadas mediante solicitud por los usuarios para acceder al reembolso”, para lo que se requería que aportaran numerosa documentación.
Por este tipo de recetas, según los cálculos del SES, se adeudarían un máximo de 1,3 millones, parte del cual ya se habría abonado a través de reclamaciones o de recetas que, aunque eran manuales, fueron informatizadas por los farmacéuticos. “Hay usuarios que tristemente van a quedarse sin que se les devuelva su dinero, porque no tenían cumplimentada toda la documentación que se exigía”, ha explicado Ceciliano Franco.
Para tratar de devolver este exceso de copago la Junta va a hacer una revisión de todas las recetas manuales, que deben archivarse al menos cuatro años.
En Badajoz, almacenadas en los sótanos del Hospital Infanta Cristina, hay casi cuatro millones de recetas, que tendrán que ser revisadas una a una y recuperarse toda la documentación si procede el abono.
Sin embargo, en Cáceres, según ha denunciado Franco, no se pueden acceder a esas recetas, ya que se quemaron sin tener en cuenta que podían tener exceso de copago, por lo que será “dificilísimo” saber la cantidad que les puede corresponder de devolución, aunque la Junta estima un global de en torno a 500.000 euros.
Por su parte, el diputado del PP José Ángel Sánchez Juliá ha acusado al PSOE de “crear una burbuja” durante la pasada legislatura, al “inflar” los datos por este concepto, y ha criticado que ahora se vea que el proceso es complicado y “no haya tanta urgencia para comer o pagar medicamentos”.
