Critican a Ecologistas por plantar árboles junto a la muralla de Badajoz

La Asociación Cívica “Ciudad de Badajoz” ha lamentado que Ecologistas en Acción haya realizado un llamamiento público para plantar árboles en el foso de la muralla abaluartada “ignorando” la protección que debe tener dicho elemento, que forma parte de un Bien de Interés Cultural, y donde “está prohibido intervenir sin la correspondiente autorización”.

En un comunicado, el colectivo ha afirmado que en esta acción reivindicativa realizada por un grupo de personas “bienintencionadas” se atenta, sin embargo, contra el patrimonio histórico de la urbe.

Ha recordado que la plantación de árboles junto a la muralla puede ocasionar graves daños estructurales por el crecimiento de sus raíces y algunos de los plantados “apenas se separan dos metros de los lienzos de la muralla”.

Por otro lado, la Ley de Patrimonio Histórico y Cultural exige que no se coloquen elementos que puedan perturbar la contemplación del bien, como sucede si se deja crecer una cortina vegetal, ha agregado.

Fosos, sin vegetación

Según la asociación, desde mediados del siglo XX la mayor parte de los fosos se han ocupado con vegetación, en muchos casos con “verdaderas arboledas de especies ornamentales” sin tener en cuenta que se ocupa y daña un monumento histórico.

Ha criticado que durante décadas se haya “ignorado y maltratado” este monumento, al que todavía muchos ciudadanos ven como “un simple descampado con piedras viejas que se deben tapar bien con vallas publicitarias, bien con construcciones (como el antiguo colegio de Botoa) o con árboles”.

Por ello, ha solicitado a los responsables de la actividad que “procedan a trasplantar esos arbolitos en un lugar más adecuado, pues en la ciudad hay innumerables espacios desarbolados”.

Ha subrayado su apuesta por una ciudad más ecológica y sostenible, donde prime “el verde sobre el asfalto” y donde los árboles sean elementos principales en todas las calles, pero se ha preguntado si “a alguien se le habría ocurrido plantar árboles en la escena del Teatro Romano de Mérida o entre los menhires de Stonehenge”.