Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

No debe ser región para intrigantes

Rajoy reúne a los principales dirigentes del PP para preparar el 24M

Javier Casado

Durante los años que duró el mandato de Rodríguez Ibarra, una parte de la sociedad civil extremeña defendimos la necesidad de que el poder político no tuviera tanta presencia en todos los ámbitos de los ciudadanos, copando desde las instituciones hasta las asociaciones de vecinos. Nos opusimos abiertamente al intervencionismo, a la ocupación y desnaturalización de las instituciones.

El cambio en la manera de hacer política que auspiciaba la llegada de Monago a la presidencia de la Junta se ha visto frustrado desde el primer momento y ha llegado a su más alta expresión en dos casos muy concretos: Caja Rural de Extremadura y Acorex, en los que la ambición ha sido una vez más refugio del fracaso.

En ambos casos se ha escenificado claramente que las maquinaciones realizadas desde el poder causan más perjuicios que beneficios si no van acompañadas de planificación, inteligencia y el objetivo de mejorar las condiciones de vida de todos los extremeños (no sólo las concretas del círculo próximo a los intrigantes o maquinadores). Ya se sabe que la ambición en sí misma no garantiza éxitos, ya que está más descontenta de lo que no tiene que satisfecha de lo que tiene.

Cuando esas maquinaciones se frustran, por las resistencias que ofrecen desde dentro los afectados, o por la inoperancia de los cargos-títere que se sitúan al frente por designación política, es cuando se percibe con total claridad la falta de controles eficaces para exigir responsabilidades económicas a los gestores y a los políticos.

Y aún cuando tales controles existan, también constatamos la parálisis que sufren quienes se convierten en cooperadores necesarios frente a las maquinaciones y las intrigas: los partidos políticos de la oposición, los sindicatos y los afectados; que, casi en comandita, suelen optar por mirar para otro lado o por confundir el mal uso de los fondos públicos con las cuestiones personales. Para ellos la rigurosa fiscalización de cada céntimo de euro público invertido equivale a  lo que se denomina un “concepto jurídico indeterminado”.

A día de hoy nadie discute que tenemos una democracia en pañales, que dista mucho de las exigencias legales y éticas de responsabilidad política existentes Estados Unidos o Gran Bretaña, por ejemplo. Será porque llevamos algo más de treinta años de democracia frente a sus doscientos.

Si los extremeños no queremos que esta tierra siga siendo región para intrigantes y enredadores de lo público, tenemos que aprender a exigir responsabilidades económicas, penales y políticas a todos los que se aprovechan de su cargo para llevar a cabo actos envueltos en la sospecha del conflicto de intereses entre lo público y lo privado. No seamos espectadores de la misma obra picaresca de siempre, interpretada por actores con idéntica 

En un tiempo en que las ideologías se diluyen como un azucarillo y las ideas están en busca y captura, no me resisto a reproducir una frase sin citar a su autor, aún a sabiendas de que casi todos los miembros del Consejo de Gobierno extremeño le habrán aplaudido a rabiar, rayando en la adoración (aunque es obvio que ni le han escuchado ni comprendido):

“Una sociedad libre, una sociedad que para ser mayor de edad ni necesita ser tutelada ni necesita ser dirigida ni necesita ser salvada. Dejemos a los ciudadanos y a la sociedad española que vivan, se expresen, trabajen y se desarrollen en libertad…Nunca tendrá este partido ni ofrecerá a los ciudadanos españoles una política que suponga miedo a la libertad. No hay que tener nunca miedo a la libertad, sino al contrario, fomentarla, expandirla …”

¿De quién será esta frase? ¿San Mariano bendito? ¿Dolores Cospedal? ¿Carlos Floriano?¿Redondo & Asociados, Public Affairs Firm? ¿Belén Esteban?

Una pista: La pronunció en un congreso de refundación de su partido, celebrado en Sevilla en 1990. Tiene bigotito y cuentan que habla catalán en la intimidad e inglés con su mujer  (esto último solo cuando toman una relaxing cup of café con leche en la Plaza Mayor de Madrid).

Etiquetas
stats