Encerrados en casa sin ascensor: miles de extremeños no salen de sus viviendas por problemas de accesibilidad

Las escaleras y el portal son los espacios de las comunidades vecinales donde peor se desenvuelven. La ayuda de amigos y familiares es el principal recurso utilizado para poder salir de sus casas.

Más de 69.000 personas tienen en Extremadura problemas de movilidad, de los que más de 4.000 no salen nunca de su casa. Así lo refleja un informe realizado por la Fundación Mutua de Propietarios, que señala además que la falta de accesibilidad del edificio provoca que un 18 por ciento haya tenido que cambiar de casa.

El estudio “Movilidad reducida y accesibilidad en el edificio”, elaborado en colaboración con Cocemfe, tiene el objetivo de conocer la situación en la que viven los 4.122 extremeños que tienen movilidad reducida.

Encerrados en casa

De acuerdo con el informe, un 38 por ciento de este grupo social en Extremadura pasa muchos días sin salir de casa, siendo uno de los principales motivos la falta de accesibilidad del inmueble en el que residen.

De hecho, el 34 por ciento considera que si su edificio estuviera más adaptado a sus necesidades saldría con más frecuencia de casa, un porcentaje que se duplica en el caso del 18 por ciento de las personas con movilidad reducida que residen en edificios sin ascensor.

El estudio también desvela que un 48 por ciento de los encuestados extremeños tiene problemas de movilidad sin ser usuarios de silla de ruedas, bien porque utilizan algún tipo de sistema de apoyo (muletas, bastón, andador…) o simplemente porque tienen una deambulación de forma inestable.

Accesibilidad universal

Recuerda que la normativa vigente atribuye a las comunidades de propietarios la responsabilidad de garantizar la accesibilidad en el edificio, pero el estudio detecta que las comunidades con mayor número de vecinos son los que, en menor medida, han realizado acciones en favor de la accesibilidad.

Por este motivo, la Fundación Mutua de Propietarios y Cocemfe reclaman la creación de un Fondo Estatal por la Accesibilidad Universal, haciendo hincapié en que “es imprescindible que se establezcan ayudas específicas para todas las comunidades vecinales que deban afrontar obras de accesibilidad para garantizar el derecho a una vida independiente”.

Según el informe “Movilidad reducida y accesibilidad en el edificio”, las limitaciones de movilidad derivan, principalmente, en una dificultad para desplazarse dentro y fuera de casa, y por este motivo, las carencias en materia de accesibilidad de los inmuebles han propiciado que un 18% de las personas con movilidad reducida en Extremadura haya tenido que cambiar alguna vez de domicilio por este motivo.

Para tratar de solventar esta situación, los principales recursos utilizados por los extremeños con movilidad reducida son la ayuda de familiares y amigos (66%), además de que un 18 por ciento cuenta con personal profesional de apoyo y un 26 por ciento recibe ayudas económicas, siendo destacable que un 12 por ciento asegura que no dispone de apoyo.

Las nuevas tecnologías también están jugando un papel positivo en la realización de las tareas habituales, ya que un 46% asegura que las utiliza para sus gestiones y un 34% para realizar compras por internet.

No obstante, se percibe en el estudio una brecha digital que afecta a los mayores de 60 años y a quienes viven en zonas geográficas con servicios digitales menos desarrollados.