Anova valora la colaboración con el BNG pero defiende “trabajar seriamente” por AGE
Unidad orgánica no, pero acuerdos e interlocución sí. El fin de semana en el que Anova celebró la primera parte -la deliberativa- de su primera asamblea nacional sirvió también para que la formación liderada por Beiras se reafirmara en su hoja de ruta y estrategia alrededor de AGE, pero también para que las manifestaciones de sus líderes hayan dejado claro que valoran las llamadas a la unidad que llegan del BNG.
El propio Xosé Manuel Beiras calificó -antes de la asamblea- de “muy positivas” las propuestas que llegaron de Xavier Vence, nuevo portavoz nacional del BNG, que apostó por la “interlocución” entre el nacionalismo gallego. El portavoz de Anova tiene claro, no obstante, que la unidad orgánica no es posible, ya que eso sería “meter la historia política del nacionalismo gallego de los últimos diez años en la moviola”. Sí apostó por tender puentes “si se trata de interlocución, de buscar acuerdos en los espacios en los que estemos de acuerdo y buscando los puntos comunes de coincidencia de los que, en definitiva, somos nacionalistas y de izquierda”, aseguró antes de la asamblea deliberativa de su formación.
Aun así, y a pesar de agradecer las palabras de Vence, Beiras no dudó en censurar las declaraciones de otros líderes del Bloque. “Dicen que nos fuimos porque perdimos en la asamblea de Amio o que nos financiamos con dinero de las alcaldías que usurpamos al BNG. ¿Entonces cómo se puede hablar de unidad y menos orgánica?”, aclaró. “Habrá interloución y se puede caminar juntos”, insistió.
Además, y ya en la clausura del encuentro de Anova en Compostela, llamó a la formación a “trabajar seriamente en favor de AGE” para desarrollar un programa político que cree “dinamita pura”. Y pide hacerlo de la mano “de las clases oprimidas” para “llevar adelante la transformación radical de la sociedad” en este contexto de crisis.
Del mismo modo, recordó que a la coalición de AGE “vinieron los que quisieron” y defendió los frutos de la colaboración con Izquierda Unida en el Parlamento, así como el trabajo junto a Ecosocialistas y Equo. “Pido que empecemos a ser lo que se peleó en construcción para hacer un movimiento sociopolítico anclado en la izquierda radical y rupturista que defienda la soberanía y la independencia”, añadió.
“Anova está elaborando un proyecto común que no puede ser ni asumido por los demás, ni un mosaico de diversos proyectos, sino el resultado de la combinación de individuos con la aportación de grupos políticos”, remarcó.
Antes, Francisco Jorquera, portavoz parlamentario del Bloque, había advertido en una entrevista en la Cadena Ser de que el BNG “trabaja para recuperar” esa unidad y se mostró dispuesto a “hablar con quién sea y cuando sea”, a pesar de aclarar que su formación “es la fuerza más importante del nacionalismo”, pero “abierta a alianzas”.
Beiras también dejó claro que Anova no es la formación hegemónica del nacionalismo. Ni mucho menos. “El BNG tiene toda una red de sedes que nosotros no tenemos”, argumentó. Así, insistió en que la nueva formación vio la luz “convencida de que era necesario un nuevo proyecto, una nueva lectura de la realidad y, sobre todo, un nuevo proyecto común, pero no para desplazar a nadie”. “La asamblea deliberativa tiene el sentido claro de clarificar mejor las cosas para luego hacer una reflexión hasta la asamblea definitiva de junio”, añadió.
Martiño Noriega, responsable de acción institucional de Anova, también cree que Anova debe ser la que “marque cuáles son sus caminos colectivos hacia las alianzas” y defendió la apuesta por AGE durante la asamblea deliberativa. “Somos la pequeña parte de una mayoría que entiende que AGE es el punto de partida”, aseguró, tras situar como uno de los objetivos “construir una nueva cultura”, que “no es una táctica ni una estrategia, sino el intento en la praxis de nuevas maneras de relacionarse”.
Ya en la clausura de la asamblea, Xosé Manuel Beiras se mostró confiado en que “en junio Anova tenga los planos para construir el edificio”. “Sé que será una marea azul y roja”, remató.
Aun así, también se quejó. “Echamos de menos que, más allá de las plataformas ciudadanas, lo que son propiamente las organizaciones políticas que están al pie de la coalición están nutriéndonos muy poca cosa y estamos sintiéndonos con anemia; y esto tiene que hacerlo Anova y lo que corresponda a IU”, lamentó.