Feijóo anuncia ayudas para material escolar un año después de eliminarlas
A finales de mayo de 2014 las familias del alumnado que acude a la enseñanza pública en Galicia se encontraron con una nueva sorpresa en forma de recorte. Las ayudas parciales con las que la Xunta había sustituido el modelo de préstamo universal de libros de texto restringían sus condiciones en un ámbito nada menor. El cheque de la Consellería de Educación, de entre 90 y 190 euros, dejaba de ser válido para sufragar los gastos de libros y material escolar y pasaba a poder destinarse únicamente a los manuales. Esa limitación sigue vigente en la orden dictada este año, que afecta al curso 2015-2016. No obstante, y en medio de la polémica por la implantación del denominado “fondo solidario” de libros de texto, el presidente de la Xunta acaba de anunciar que se dispone a aprobar ayudas para material escolar un año después de eliminarlas.
Este martes PSdeG y AGE trasladaron a la sesión de control del Parlamento el malestar existente en el seno de la comunidad escolar a causa del nuevo modelo, que hace convivir las ayudas parciales con un préstamo en dos cursos de Primaria y en otros tantos de la ESO. El nuevo préstamo nace lleno de incógnitas por, entre otros aspectos, ser paralelo a los bancos de libros creados por las AMPAS y no garantizar, a priori, que los libros llegarán a todo el alumnado que los necesite. “Hágales caso a las AMPAS y reponga el sistema que heredó del bipartito”, reclamó Yolanda Díaz. “¿Va a continuar con este modelo discriminatorio?”, preguntó el socialista José Luis Méndez Romeu.
Ante las críticas, el presidente de la Xunta aseguró “no entender muy bien” las críticas de la oposición al nuevo modelo de préstamo -cuya base es la orden de ayudas de 2014- y defendió, como en otras ocasiones, las ayudas parciales, ya que, afirma, estos subsidios garantizan la “gratuidad de los libros de texto” a quien “más la necesita”, mientras que “los ricos” tienen que pagar los manuales. “Las familias con menos recursos saben que tienen un aliado en Galicia: el Gobierno de la Xunta”, proclama Alberto Núñez Feijóo para anunciar una “línea de ayudas para la adquisición de material escolar”. Esta “línea”, afirma, se traducirá en un “cheque de entre 40 y 50 euros para material escolar” y “llegará a entre 60.000 y 70.000 alumnos” a los que se “ayudará” a comprar material además de los libros, “que los tienen gratis”, asegura.
Más allá de que las ayudas parciales no suelen cubrir el coste total de los libros, si el nuevo “cheque” para material escolar llega, como avanzó el presidente, a unos 70.000 estudiantes, esto implica que apenas cubrirá a la mitad del alumnado que recibe la ayuda para los libros, toda vez que según los presupuestos de la Consellería de Educación esta beneficia a más de 140.000 alumnos y alumnas. Mientras, los estudiantes que se queden fuera del nuevo cheque seguirán sin poder emplear dinero de las ayudas de los libros para combprar material escolar, ya que la orden en vigor lo prohíbe. Esta, precisamente, era una práctica habitual entre las familias que recibían ayudas para libros en años anteriores, toda vez que podían emplear el cheque de la Xunta para material y echar mano de los bancos de libros de las AMPAS para obtener los manuales.
En estos contexto, la oposición insta al presidente a abandonar el modelo mixto y retornar “a la gratuidad absoluta” con el préstamo universal, “más equitativo” y que además, subraya Romeu, “cuesta mucho menos”. Mientras, el titular de la Xunta se declara “sorprendido” por el “planteamiento de la nueva izquierda”. “Por un momento pensé que pertenecía al banco de los conservadores ingleses, pero las cosas pueden ser de cualquier tipo de planteamiento”, dice, mientras enmarca el nuevo “cheque” en el paquete de medidas sociales que el PP gallego promociona desde después de las elecciones municipales.