El Sindicato de Xornalistas culpa al “contexto laboral y empresarial” de la cobertura del 'caso Asunta'
¿Quién es el responsable de los excesos informativos y de la falta de ética mostrada por algunos medios de comunicación en el caso de Asunta Basterra? ¿Los periodistas? ¿sus empresas? ¿ambos? ¿Los lectores y espectadores? El Sindicato de Xornalistas de Galicia (SXG) acaba de hacer público un pronunciamento, “ante el tratamiento amarillista y sensacionalista que estos días se ha dado y se está dando en los medios de comunicación de Galicia y de España sobre el caso”, en el cual advierte que “el actual contexto laboral del periodismo es campo abonado para que este indefendible modelo pseudoinformativo se reproduzca en muchas más ocasiones”. Califica de “enormemente injusto y simplista” colocar sobre las espaldas de redactores y periodistas gráficos “la responsabilidad única de la indignante y pésima cobertura que se está haciendo del caso” y concluye que “más precariedad en el periodismo implica una peor información para la sociedad”.
El SXG les reclama “autocrítica y reflexión profunda” a los editores de los medios de comunicación y recuerda que las actuales condiciones de precariedad laboral que dominan la profesión hacen que para el trabajador de la información “resulte imposible hacer uso de ninguna cláusula de conciencia para negarse a hacer la cobertura de casos tan sensibles como este desde los enfoques editoriales sensacionalistas decididos por sus jefes”. En concreto, destaca que “la gran mayoría de los medios gallegos que más cruentos están siendo en el tratamiento pseudoinformativo del caso llevan tres años con continuos recortes de sus plantillas, ERES y rebajas brutales de los sueldos de los pocos periodistas que quedan en ellos, además de sacar de las redacciones a muchos periodistas experimentados para sustituirlos por otros más jóvenes y peor pagados”.
Añaden que “las prácticas laborales de estas empresas dejan a las claras la falta de una apuesta por un modelo serio de periodismo de calidad, reflexivo y de servicio a la sociedad”, pues “en una alocada competición entre medios” se está eligiendo un modelo “de sensacionalismo, amarillismo, espectáculo y total falta de rigor informativo”. El sindicato concluye que se trata de una “elección consciente de los editores y dueños de estos medios, que son los máximos responsables de todo lo que se publica, de su rigor o falta de él y del enfoque elegido que se le ofrece a la ciudadanía”.
El sindicato afirma encontrarse ante el deber de denunciar “aquellas prácticas que contribuyan a hundir en el desprestigio social esta profesión y a los trabajadores que la ejercen”, ya que existe en la sociedad “una visión negativa sobre el periodismo”, constatada por encuestas y estudios,“y son situaciones como esta las que contribuyen con fuerza a desprestigiar nuestra profesión aun más si cabe”.
El SXG propone la puesta en marcha de herramientas regulatorias como el Estatuto del Periodista Profesional, reclamado desde hace años por los sindicatos de periodistas a través del Foro de Organizaciones de Periodistas y rechazado por los principales partidos del Estado, o la creación de comisiones independientes de control del sector audiovisual, que “podrían haber ayudado a evitar en gran parte este indignante comportamiento de los medios, carente de responsabilidad social”.
Finalmente, le reclama a todos los medios que se den “por aludidos de este mensaje” y les recuerda a los trabajadores de la información “la importancia de tratar este tipo de temas con la mayor sensibilidad, a pesar de la realidad laboral en la que nos encontramos”, así como a tener en cuenta que “en aquellas piezas en las que ponen sus firmas se hacen responsables de que el contenido ha sido elaborado con los debidos procedimientos profesionales de verificación y veracidad”, pues “no solo es su prestigio individual el que está en juego, sino el de la profesión de la que pretenden vivir”.
¿Quiénes el responsable de los excesos informativos y de la falta de éticamostrada por algunos medios de comunicación en el caso de AsuntaBasterra? ¿Los periodistas? ¿sus empresas? ¿ambos? ¿Los lectoresy espectadores? El Sindicato de Xornalistas de Galicia (SXG) acaba dehacer público un pronunciamento, “ante el tratamientoamarillista y sensacionalista que estos días se ha dado y se estádando en los medios de comunicación de Galicia y de España sobre elcaso”, en el cual advierte que “el actual contexto laboraldel periodismo es campo abonado para que este indefendible modelopseudoinformativo se reproduzca en muchas más ocasiones”.Califica de “enormemente injusto y simplista” colocar sobrelas espaldas de redactores y periodistas gráficos “laresponsabilidad única de la indignante y pésima cobertura que seestá haciendo del caso” y concluye que “más precariedaden el periodismo implica una peor información para la sociedad”.
ElSXG les reclama “autocrítica y reflexión profunda” a loseditores de los medios de comunicación y recuerda que las actualescondiciones de precariedad laboral que dominan la profesión hacenque para el trabajador de la información “resulte imposiblehacer uso de ninguna cláusula de conciencia para negarse a hacer lacobertura de casos tan sensibles como este desde los enfoqueseditoriales sensacionalistas decididos por sus jefes”. Enconcreto, destaca que “la gran mayoría de los medios gallegosque más cruentos están siendo en el tratamiento pseudoinformativodel caso llevan tres años con continuos recortes de sus plantillas,ERES y rebajas brutales de los sueldos de los pocos periodistas quequedan en ellos, además de sacar de las redacciones a muchosperiodistas experimentados para sustituirlos por otros más jóvenesy peor pagados”.
Añadenque “las prácticas laborales de estas empresas dejan a lasclaras la falta de una apuesta por un modelo serio de periodismo decalidad, reflexivo y de servicio a la sociedad”, pues “enuna alocada competición entre medios” se está eligiendo unmodelo “de sensacionalismo, amarillismo, espectáculo y totalfalta de rigor informativo”. El sindicato concluye que se tratade una “elección consciente de los editores y dueños de estosmedios, que son los máximos responsables de todo lo que se publica,de su rigor o falta de él y del enfoque elegido que se le ofrece ala ciudadanía”.
Elsindicato afirma encontrarse ante el deber de denunciar “aquellasprácticas que contribuyan a hundir en el desprestigio social estaprofesión y a los trabajadores que la ejercen”, ya que existeen la sociedad “una visión negativa sobre el periodismo”,constatada por encuestas y estudios,“y son situaciones como estalas que contribuyen con fuerza a desprestigiar nuestra profesión aunmás si cabe”.
ElSXG propone la puesta en marcha de herramientas regulatorias como elEstatuto del Periodista Profesional, reclamado desde hace años porlos sindicatos de periodistas a través del Foro de Organizaciones dePeriodistas y rechazado por los principales partidos del Estado, o lacreación de comisiones independientes de control del sectoraudiovisual, que “podrían haber ayudado a evitar en gran parteeste indignante comportamiento de los medios, carente deresponsabilidad social”.
Finalmente,le reclama a todos los medios que se den “por aludidos de estemensaje” y les recuerda a los trabajadores de la información“la importancia de tratar este tipo de temas con la mayorsensibilidad, a pesar de la realidad laboral en la que nosencontramos”, así como a tener en cuenta que “en aquellaspiezas en las que ponen sus firmas se hacen responsables de que elcontenido ha sido elaborado con los debidos procedimientosprofesionales de verificación y veracidad”, pues “no soloes su prestigio individual el que está en juego, sino el de laprofesión de la que pretenden vivir”.