El fotógrafo del meme del verano no sabía lo que era un meme

Ha sido la imagen omnipresente en las redes sociales en las últimas dos semanas y ahora, por fin, sabemos un poco más sobre lo que hay detrás de la imagen que se ha convertido en meme del “novio distraído”. Esta fotografía de recurso, cuyo título original era “Hombre infiel camina con su novia y mira asombrado a otra seductora chica”, es obra del fotógrafo barcelonés Antonio Guillem.

Guillem no ha dado muchos detalles a los periodistas que han intentado ponerse en contacto con él, ofreciendo la misma respuesta vía email a todos. Solo ha permitido que la prensa contacte con los modelos a través de él mismo, utilizando sus nombres artísticos: Laura y Mario.

El fotógrafo cuenta que fueron los propios modelos los que le alertaron de que la imagen se estaba haciendo popular. “Hasta hace poco ni siquiera sabía lo que era un meme”, comenta. “Los modelos descubrieron el meme en las redes sociales y me lo contaron. Ninguno de nosotros podía imaginarse la repercusión mediática que ha alcanzado”.

En Twitter, esta fotografía que se realizó a mediados de 2015 se ha utilizado para hacer montajes que lanzan ideas sobre breves análisis políticos.

Aunque en realidad no existe fenómeno cultural que no pueda ser relatado con esta foto.

Guillem cuenta que ha trabajado con estos modelos en diferentes ocasiones, lo cual explica por qué hay tantas instantáneas de los tres en diferentes poses. Esto ha facilitado a la creativa comunidad de Twitter dar un final a esta historia.

Os incluso un posible comienzo.

Las expresiones de los tres modelos se han vuelto tan reconocibles que hay adaptaciones protagonizadas por ellos mismos en otros memes.

Sin embargo, Guillem tiene una advertencia para aquellas personas que difunden libremente la foto en la red modificada en Photoshop: “No está permitido utilizar ninguna imagen sin haber comprado la licencia pertinente de ninguna manera, por lo que la gente que está utilizando imágenes sin licencia está haciendo algo ilegal”, avisa. “Pero lo que realmente nos preocupa y no vamos a permitir, y para ello tomaremos medidas legales apropiadas, es que se utilicen estas imágenes de una manera peyorativa, ofensiva o de algún modo que pueda dañar a los modelos o a mí. Estoy hablando por ejemplo de las imágenes en las que sus caras son sustituidas por una cara de perro, una bolsa de basura y una bolsa de comida para perros”.

Sigue siendo un misterio qué fue de la mujer del vestido rojo. “Con dos de los modelos tengo relación personal, con la otra modelo dejé de trabajar hace más o menos un año”, explica el fotógrafo.

Según explicó el fotógrafo a los medios, el modelo Mario le asegura que nunca miraría a una mujer de esa manera y Laura añade: “Creo que todas alguna vez en nuestras vidas hemos sido como la mujer del vestido rojo; quizá sin que nos hayan mirado con tanto descaro”.

Según la web Know Your meme, la primera vez que la fotografía fue publicada con los rótulos que nos son ahora familiares fue en enero de 2017 en Facebook. En ese momento quería relatar cómo Phil Collins le estaba dando la espalda al rock para interesarse más en el pop. Le llevo algo más de tiempo alcanzar el nivel de popularidad que tiene hoy.

Aún así, ahora que la foto ya está siendo explicada por los medios y utilizada por las editoriales para hacer bromas retorcidas sobre signos de puntuación, su supervivencia en Internet está, sin duda, a punto de terminar.

Y siempre hay que tener esto en cuenta.