El traficante de armas intercambiado por la jugadora Brittney Griner se mete en un partido ultra al volver a Rusia
Viktor Bout, el traficante de armas ruso que la semana pasada regresó a su país a cambio de la liberación de la estrella de baloncesto estadounidense Brittney Griner, se ha unido al Partido Liberal Democrático (LDPR), una formación ultraderechista y afín al Kremlin con la que podría llegar a ocupar un escaño en la Duma, el parlamento ruso.
“Quiero dar las gracias a Viktor Anatolievich [Bout] por la decisión que ha tomado, y darle la bienvenida a las filas del mejor partido político de Rusia en este momento”, ha dicho el líder del LDPR, Leonid Slutsky, en un vídeo difundido por Telegram donde aparece junto a Bout.
Ideología xenófoba y ultranacionalista
Desde su fundación en 1991 y a pesar de su nombre, el Partido Liberal Democrático ha propagado una ideología xenófoba y ultranacionalista, pidiendo la invasión rusa de los países que integraban la antigua Unión Soviética.
El partido también ha servido de trampolín a personajes indeseables de la política rusa. Andrei Lugovoi, un exagente del KGB al que Reino Unido responsabiliza del asesinato al opositor ruso Alexander Litvinenko, obtuvo en 2007 su escaño en la Duma como miembro del LDPR.
Bout, cuya liberación ha sido presentada por Moscú como una importante victoria de relaciones pública, ha dicho este lunes a los medios rusos que no tiene planes inmediatos de participar en “ningunas elecciones”.
El ingreso de Bout en el LDPR ha sido celebrado por varias personalidades próximas al Kremlin. “Viktor Bout no es una persona, es un ejemplo de firmeza”, ha dicho Yevgeny Prigozhin, el poderoso empresario ruso detrás del grupo de mercenarios Wagner y aliado próximo a Vladímir Putin. “No hay duda de que Bout será bueno al frente de cualquier partido y movimiento”, ha añadido Prigozhin en un comunicado de Concord, su empresa de catering.
Apoyo a la invasión de Ucrania
Nada más aterrizar en Moscú la semana pasada, Bout comenzó una gira mediática organizada por el Kremlin en la que ha elogiado a Putin y ha respaldado la invasión de Ucrania.
Su primera entrevista en Rusia se la concedió al canal estatal ruso RT. Lo entrevistó Maria Butina, quien pasó más de un año en prisión en Estados Unidos por ser una agente no registrada de Rusia.
“Estoy orgulloso de ser ruso y de que nuestro presidente sea Putin”, dijo Bout a Butina. Añadió que tenía una foto de Putin en su celda de la cárcel estadounidense. “Sé que ganaremos”, dijo sobre la guerra de Rusia en Ucrania.
El expiloto de la fuerza aérea soviética, presuntamente vinculado con los servicios de espionaje de Rusia, dijo que se habría presentado voluntario para el frente si hubiera tenido la “oportunidad y las habilidades necesarias”. “¿Por qué no lo hicimos antes?”, dijo Bout sobre la decisión de Putin de lanzar la invasión.
Haciéndose eco de las últimas arremetidas de Putin contra las democracias liberales, Bout también predijo el fin de la civilización occidental. “Lo que está ocurriendo en Occidente es simplemente el suicidio de la civilización... Y puede estar ocurriendo en todos los ámbitos, entre ellos el de las drogas y el del colectivo LGBT+”, dijo.
Traducción de Francisco de Zárate.
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