“La disciplina y la lealtad han sustituido en la política al mérito y la capacidad”
José María de Miguel tenía sólo 33 años cuando fue elegido presidente del Gobierno de La Rioja en la primera legislatura de nuestro parlamento regional, con la dificultad añadida de tener que poner en marcha la nueva administración autonómica. Corría el año 1983 y su partido, el PSOE, había ganado las elecciones con mayoría absoluta: un logro que los socialistas riojanos no han vuelto a repetir desde entonces.
El ejercicio del poder no le hizo prisionero de la política y en 1987 decidió no presentarse a la reelección para regresar a la actividad privada como asesor fiscal. “No quería hacerme un profesional de la política”, dice más de 20 años después, sin añoranza del protagonismo y los honores que tuvo como presidente. De hecho, los recuerdos de aquella época los guarda en cajas, alejados de cualquier exhibición doméstica, a excepción de dos placas a las que tiene especial cariño.
Su condición de “ex” la lleva con discreción: no se prodiga en actos públicos ni en los medios de comunicación, a pesar de que cualquier tema le preocupa y le interesa: desde la economía regional hasta el desarrollo autonómico, pasando por el devenir de la clase política. De todo ello habla con lucidez, como observador privilegiado que es, y con la libertad de haber tomado distancia y ganado en independencia. A veces también se percibe pasión en su discurso, como si siguiera al pie del cañón; se lo decimos y él responde tajante: “Es que nunca me he ido de la política”.
RIOJA2.COM(R2): La desconfianza en los políticos ha aumentado hasta convertirse en uno de los principales problemas para los españoles. ¿A qué lo achaca, además de a la corrupción?
JOSÉ MARIA DE MIGUEL (JMDM): La política se está degradando frente a la sociedad de tal manera que ahora mismo nadie quiere acceder a un partido político, y el problema se retroalimenta. En mi época conocí a gente entregada en todos los partidos, había muy buena clase política, pero ahora no puedes contar con ese tipo de personas porque están en sus despachos, en sus trabajos, y la política no les aporta nada. Encima, como consecuencia de la degradación, la gente exige castigo y menos sueldo para los políticos, y los considera a todos unos chorizos, cuando yo creo que no es verdad.
R2:¿Tanto ha empeorado la situación en 23 años?JMDM:
Sí, sin duda, mucha gente que en otra época hubiera estado dispuesta a dar un paso e implicarse en un momento determinado en la política, ahora no da ese paso, y eso degrada clarísimamente.
R2:Su camino a la vida pública fue de ida y vuelta, con regreso a la actividad privada, ¿ése debería ser el modelo?
JMDM: Bueno, los partidos necesitan gente en el aparato que asegure permanencia y estabilidad, pero también deben nutrirse de personas de ida y vuelta, con independencia económica y profesional, y con experiencia en el mundo real. Tiene que haber gente de este tipo para que tengamos una clase política más aceptable; además, es un disparate que todos sean profesionales de la política. Ver la realidad desde muchos ámbitos distintos te da una mayor riqueza que observarla sólo desde los despachos de un partido.
Ahora mismo hay una generación de chavales que tienen como referencia a políticos que no han trabajado prácticamente nunca fuera de los partidos y que han triunfado. Es un ejemplo devastador porque hay un montón de jóvenes que quieren hacer carrera política a su imagen y semejanza, y ése es su objetivo fundamental, no se acercan a la política como un instrumento para hacer realidad algunas pequeñas convicciones que tengan. Quieren ser profesionales de la política y, además, quieren serlo desde jóvenes, y eso por definición es imposible: la política no debería garantizar permanencia.
R2: El afán por mantenerse en sus puestos les somete a los dictados del partido.
JMDM: Naturalmente, jamás se van a enfrentar porque no pueden. A quienes tienen miedo los aparatos son a las personas con independencia personal o económica, les tienen horror porque no son controlables. Por eso no quieren listas abiertas, aparte de que darían más poder a los medios de comunicación porque podrían generar candidatos.
R2: En el Debate sobre el estado de la Región acusaron a Pedro Sanz de haberse intentado afiliar al PSOE y al PR antes de llamar a la puerta del PP.
JMDM: Recuerdo perfectamente que él estuvo a punto de incorporarse al PSOE y que por sus tratos para entrar, le prepararon la transformación mágica de profesor de educación especial a jefe de nóminas, sin ni siquiera un cursillo, fue una cosa absolutamente especial. Imagino que luego él decidiría otras cosas y por eso acabó en el PP. Pero ahora eso es frecuentísimo: en todos los partidos hay gente absolutamente intercambiable, que no tiene convicciones o no las ves.
R2: Dice Ángel Gabilondo: “Esos que desde el vientre de su madre ya piensan en el momento en que van a ser ministros o rectores me parecen gente peligrosa”.
JMDM: Totalmente de acuerdo. Ángel Gabilondo, por ejemplo, es un hombre que creía necesario un pacto educativo y se puso a ello sin pensar en las consecuencias para su carrera política. Él está ahí para conseguir algo concreto y entiende la política como un instrumento para hacer cosas. Pero si eres un señor que quieres vivir de ella y que, además, dejar la política y salir al exterior te da unos escalofríos tremendos, pues no arriesgas nada por sacar adelante un pacto.
Todo esto se percibe en la calle. Lo triste es que el mérito y la capacidad de las personas, que es algo básico, se va perdiendo y funciona la lealtad y la disciplina a ultranza. Todos estos fenómenos distancian a la gente de la política y a su vez la empobrecen: es un círculo que se va alimentando.
R2: ¿Qué pueden hacer los partidos para regenerar la situación actual?
JMDM: El problema es que los partidos, que son los cauces de la participación política, según dice la Constitución, hoy en día no saben cómo organizarla y cómo aglutinar a quienes tienen inquietudes. Se limitan a representar unos intereses, pero organizar la participación es dificilísimo, y eso que en teoría ahora hay más medios que nunca: los blogs, los foros… Pero los partidos tienen una crisis terrible, además de que están mal financiados y ese es el origen de la corrupción. Como no se sostienen con las cuotas, con sus propios recursos, los partidos políticos son comprables: puede venir un señor que tenga dinero B, no mucho, y comprar una organización que tiene en sus manos decisiones urbanísticas que suponen muchísimos millones. Y esto pasa en todos los partidos, en los grandes y en los pequeños, ¡ya sólo falta impunidad para que esté todo montado!
R2: Felipe González dijo que los ex presidentes son como grandes jarrones chinos en apartamentos pequeños, que no se retiran del mobiliario porque se supone que son valiosos, pero están todo el rato estorbando. ¿Cuál ha sido su experiencia?
JMDM: En su momento creí, ingenuo de mí, que sería un activo para el partido: una persona que dejaba el gobierno con sondeos favorables. Yo pensaba que sacarían pecho, pero ha sido al revés.
“CAJA RIOJA VA DE COMPARSA CON LAS CAJAS DEL PP”
“LA RIOJA DEBERÍA BAJARSE DEL CASTILLO Y PROMOVER LOS ACUERDOS ENTRE AUTONOMÍAS”
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