Arcópoli recuerda en la Plaza de Pedro Zerolo a las víctimas LGTB del Holocausto

La asociación LGTB Arcópoli convocó en la tarde de ayer sábado 27 de enero, Día Internacional de Conmemoración en Memoria de las Víctimas del Holocausto, una concentración en la Plaza de Pedro Zerolo para denunciar el olvido a que han sido sometidas las lesbianas, gais, bisexuales y trans víctimas del nazismo.

Su objetivo era recordar que al menos 10.000 personas murieron en diferentes campos de concentración durante el nazismo y que fueron muchos más los detenidos que, una vez liberados, pasaron a ser recluidos en diferentes cárceles porque la diversidad sexual y de género continuó siendo considerada delictiva en algunas democracias como Francia e Inglaterra hasta varias décadas después.

Un acto que no solo quería servir de homenaje a esas personas, sino que también tenía como objetivo reclamar la instalación en la Plaza de Pedro Zerolo (la antigua Vázquez de Mella) un memorial que recuerde a las víctimas de la homofobia, transfobia y bifobia a lo largo de la historia de nuestro país, especialmente los de la persecución contra el colectivo de la dictadura franquista, tal y como se aprobó en el pleno del Ayuntamiento de Madrid en julio de 2015.

Yago Blando, coordinador de Arcópoli, quiere destacar que «la historia de nuestro colectivo ha estado marcada por la persecución y, aunque hoy podamos celebrar la consecución de una serie de derechos, no podemos olvidar el gran trabajo que fue preciso para llegar hasta aquí y las miles de personas que fueron víctimas de esta discriminación».

Asimismo, considera que es necesario «recordar lo sucedido durante el Holocausto, durante la dictadura franquista, lo que aún sigue sucediendo hoy tanto en Madrid como en muchas otras partes del planeta, y reclamamos una reparación que puede y debe comenzar con la instalación del monumento conmemorativo que fue aprobado en el Pleno del Ayuntamiento hace ya dos años».

En el acto se pudo leer una pancarta firmada por Arcópoli en la que se podía leer «Que nuestro nombre no se borre de la Historia. Queremos el monumento en memoria de las víctimas de la homofobia, transfobia y bifobia».

Además, en el suelo se colocaron triángulos rosas invertidos (símbolo con el que se marcaba en los campos de exterminio a los homosexuales) formando un triángulo mayor y velas encendidas sobre ellos en recuerdo a las víctimas LGTB del holocausto nazi.