Vallas y bolardos para evitar atropellos de niños frente al Isabel la Católica

La calle Beneficiencia luce desde hace dos semanas varios bolardos y vallas, a la altura de su paso por el colegio Isabel la Católica. El motivo de esta infraestructura, instalada por el Ayuntamiento, es evidente: proteger a los niños de los coches que circulan confiados por la zona, especialmente cuando los menores abandonan el centro educativo.

La salida del CEIP Isabel la Católica por la calle Beneficiencia había pasado a ser la más problemática (dispone de otro acceso desde Barceló). “Los niños salen en tromba y se ponían a jugar en medio de la calle. Al estar acera y arcén al mismo nivel, no se daban cuenta de que pueden estar en la carretera”, explican a Somos Malasaña desde el AMPA del centro escolar. Esta problemática se puso en conocimiento del Ayuntamiento a principio del curso, a través de los agentes tutores. Ahora ha llegado la instalación de las vallas.

Todas las semanas, la policía local controla el tráfico a la entrada y salida del colegio. Pero la escasez de agentes hace que no todos los días se lleve a cabo esta vigilancia, indican desde el AMPA. La circulación en la zona es muy reducida, “pero los coches que pasan suelen ir bastante confiados y circulan bastante rápido porque les parece una zona poco transitada”, denuncian, lo que aumenta el peligro.

Las madres y padres del centro hicieron diferentes propuestas como peatonalizar la calle, reformar la señalización advirtiendo de la presencia del colegio, que los agentes de policía estuvieran presentes todos los días y también marcar con bolardos la carretera, que es la opción que finalmente se ha escogido, con la presencia añadida de pequeñas vallas.

La zona experimentará una importante transformación con las obras de construcción de los nuevos Jardines del Arquitecto Ribera, pegados al colegio y cuyo proyecto definitivo -que aún no se conoce- puede llegar a cambiar los usos y el tránsito de vehículos por la calle Beneficiencia.