Decía Albert Einstein que “no pretendamos que las cosas cambien si siempre hacemos lo mismo” y que “es en la crisis que nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias. Quien supera la crisis se supera a sí mismo sin quedar superado. […]Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia. Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es exaltar el conformismo. En vez de esto, trabajemos duro. Acabemos de una vez con la única crisis amenazadora, que es la tragedia de no querer luchar por superarla.”
En relación con la cita, si algo hay que decir de los vecinos de Gamonal que se están movilizando contra el bulevar que les quiere imponer el PP, es que se está en plenitud de inventiva, se está acertando con la estrategia, se está trabajando duro combatiendo el conformismo, y finalmente se está promoviendo la crisis para acabar con la crisis que les imponen las élites económicas y sus élites políticas subordinadas.
El equipo de Gobierno municipal del PP comunicó el cese temporal de las obras aturdido por las movilizaciones y la resistencia civil de los vecinos, desarmado argumentalmente en su defensa del bulevar, se ha quedado sin poder construir una imagen desde los medios de comunicación de masas que impidiese que trascendiese el conflicto a nivel nacional. No han podido evitar que esa gente que veía desde sus barrios los sucesos en los televisores o en los periódicos no se fuese solidarizando progresivamente (a pesar de lo que dicen esos constructores de opinión siempre fieles a las líneas editoriales del medio en el que trabajan que se hacen llamar tertulianos) y a su vez no identificase el proyecto del Bulevar con algo paralelo ocurrido en su ciudad. Obras faraónicas que implican el saqueo de las arcas públicas, enriquecen a una minoría privilegiada mientras se recortan, privatizan y precarizan los servicios sociales esenciales para la mayoría social, etcétera son identificadas cada día más en este sentido por la ciudadanía que de verdad quiere serlo porque aunque no conozcan Gamonal ven a diario ejemplos paralelos en su lugar de residencia, especialmente durante el periodo del festín de la especulación urbanística de la mal llamada “época de bonanza de la economía española”.
El PP ha parado temporalmente las obras a medida que veía que la militarización policial de la ciudad no servía para meter a los vecinos en sus casas, ni la campaña de criminalización mediática hacia la resistencia civil al proyecto, ni las mentiras argumentales de los representantes del equipo municipal de Gobierno, y que por el contrario si las manifestaciones de rechazo al Bulevar habían sido muy numerosas en los meses precedentes ahora lo eran aún más y desde el viernes pasado cada vez acumulaban una mayor asistencia.
No tiene sentido fiarse de la palabra del PP. El mismo día en el que por la tarde anunciaban la paralización temporal de la obra, por la noche realizase el mayor despliegue de antidisturbios desde que empezó el conflicto. No tiene sentido porque ahora dice que se va a reunir con las asociaciones de vecinos, la plataforma, partidos políticos representados en el pleno (ha contactado con todos menos con IU), es decir, lo que no ha hecho en los meses precedentes a pesar de las peticiones de dichos agentes sociales. Todo para generar una imagen de diálogo falsa (ya que a su vez dicen que continuarán con las obras), que en estos quince días se vaya apagando el incendio de indignación social y movilización en Gamonal, generar cansancio entre los que se movilizan, etcétera y poder reanudar la obra.
Hay que mantener la tensión (movilizadora, informativa, de actividades nacidas de la Asamblea), dejar claro que no se quiere el bulevar, solicitar la libertad sin cargos de los detenidos, presionar socialmente para evitar una nueva militarización policial de la ciudad, y en cualquier caso trasladar al Alcalde que cualquier proyecto que quiera presentar lo debe someter a una consulta ciudadana. Aprovechemos este conflicto social para obligar a cambiar las formas de hacer política, como por ejemplo obligando a que toda la financiación para el bulevar se invierta en el barrio y que a través de un Consejo de Barrio vivo y con participación popular el propio barrió decida en qué se invierte dicho dinero. Salvo el poder todo es ilusión, el poder popular creado a raíz de este conflicto no debe disolverse en el supuesto de que no se realice el bulevar, sino fortalecerse y dar un salto adelante apostando por desarrollar marcos de decisión popular para que no nos roben ni el presente ni el futuro y poder decidir sobre ambos. Generar poder popular, ser poder social, cultural e institucional para derrotar el poder de los ricos.
