No todo lo que existe en internet está a la vista. Hay personajes, historias y fenómenos ocultos que merecen salir a la luz. Para eso contamos con el Hematocrítico, que desde hace años, rebusca en los rincones de la red. Aquí irá publicando sus hallazgos, sin ficción, pero con mucho humor.
Los límites de la siesta
Ah. La siesta. Esa cosa tan española de tumbarse un rato después de comer para dormir un poquito y levantarse renovado.
Cierras los ojos, y a otra cosa...
Quince minutos, media hora, una hora quizás...aunque a veces se te puede ir de las manos.
Es muy frecuente leer tuits de gente que escribe que se acaba de despertar de la siesta, y he pensado que todo ese material se puede utilizar para hacer una investigación. ¿Hasta cuándo se puede considerar una siesta? ¿Cual es el límite temporal? Hice unas búsquedas y los resultados son escalofriantes:
Tres horas. Para mí esto es el límite. Es lo que legalmente debería ser el tope permitido para calificar a algo de siesta.
Creo que en eso podemos estar todos de acuerdo. Pero si algo me ha enseñado Twitter, es que no puedes dar nada por sentado.
¡Cinco horas! Creo que ya tenemos ganador... Parece imposible superar esto. A no ser que...
¿QUÉEE?
... pe... pe... pero...
¿¿¿??? ¿¿¿OCHO???
¡Es que es imposible! ¡No me salen las cuentas! Esto ya es empalmar con la noche y...
Señores, tenemos ganadora. Voy a acostarme, que me acaba de entrar un sueño...
Sobre este blog
No todo lo que existe en internet está a la vista. Hay personajes, historias y fenómenos ocultos que merecen salir a la luz. Para eso contamos con el Hematocrítico, que desde hace años, rebusca en los rincones de la red. Aquí irá publicando sus hallazgos, sin ficción, pero con mucho humor.