La madurez de Kia guía los destinos del Rio
Los polivalentes utilitarios viven una etapa de cambio. En los últimos meses han estrenado nueva generación modelos tan importantes como los Citroën C3 y Nissan Micra, y en los venideros correrán la misma suerte vehículos tan capitales para el mercado español como los Seat Ibiza y Volkswagen Polo. Entremedias, para el mes de abril, Kia pone en circulación la cuarta generación del Rio.
El utilitario surcoreano experimenta un salto de calidad que lo coloca a la altura de decanos de la categoría como Ford Fiesta (1976) o Renault Clio (1990), otros primeros coches para muchos noveles conductores (y también coche de retiro para los más avezados). Es por lo tanto un segmento de volumen, que, junto al de los compactos, es de vital importancia para cualquier marca que quiera crecer significativamente en ventas.
Con esta premisa nace el Kia Rio 2017. Con una única carrocería de cinco puertas y dimensiones prácticamente inalteradas (es un centímetro más largo, medio más ancho y medio más bajo que antes), los ingenieros han modificado ostensiblemente sus proporciones. Ahora, se acentúa su aspecto de hatchback, con una batalla alargada y un voladizo trasero recortado, trasladando el habitáculo hacia atrás.
En cuanto a los trazos estilísticos, éstos no difieren en exceso del modelo saliente. Bien podría hablarse de continuismo, o si se quiere, de herencia alemana (ahí está Peter Schreyer, diseñador jefe de Kia, ex Audi, a los mandos). El frontal es reconocible como un Kia de nueva hornada y la zaga acentúa la horizontalidad con ópticas rectangulares unidas por una nervadura en la parte superior del escueto portón.
Un portón que por cierto da paso a otra de las buenas noticias: un maletero de 325 litros, 37 más que antes, y uno de los más capaces del segmento. Algo similar ocurre con las plazas traseras, que disfrutan de un cómodo acceso y un notable espacio para dos adultos. Delante es muy fácil encontrar una postura de conducción cómoda por los amplios ajustes de asiento, cinturón y volante.
Renunciando a personalizaciones extravagantes, el salpicadero y la instrumentación del nuevo Rio apuestan por la sobriedad, favoreciendo la ergonomía. Como sucede en los últimos modelos de la marca, todo está en su sitio y es fácil de encontrar, sin necesidad de perder la atención de la carretera. Hay huecos suficientes para vaciarse los bolsillos y los materiales de puertas o el acabado del propio volante son discretos, pero de buena apariencia.
El gadget tecnológico más novedoso es el nuevo sistema de infoentretenimiento, en forma de pantalla flotante, táctil, a color y de 7 pulgadas. Además de responder con precisión a las indicaciones con los dedos, cuenta con botones auxiliares de retorno que facilitan el recorrido por las diferentes funciones, incluida la navegación TomTom o la conectividad CarPlay o Android Auto para el teléfono. Es de serie en los acabados superiores de la gama Rio.
A nivel mecánico, Kia apuesta por el motor turbodiésel 1.4 CRDi de 77 ó 90 CV de potencia y dos motores de gasolina, el 1.2 MPI de 84 CV (atmosférico) y el 1.0 T- GDI de 99 CV (turboalimentado). Éste, que será el más demandado, tiene tres cilindros, y no cuatro como el resto. Aunque consume más que el diésel (4,3 por 3,7 litros a loa 100 kilómetros en ciclo de homologación), su capacidad de aceleración es la misma, si no más, y funciona con más suavidad y con una entrega de la potencia más lineal.
Dinámicamente, como buen utilitario que es, guarda un compromiso muy bueno entre comodidad y dinamismo. Sin poder hablarse de un coche ágil, el nuevo Rio tiene unas reacciones en curva más nobles y seguras que antes, ganando en estabilidad lineal. También se aprecia que es un coche muy trabajado a nivel de insonorización. Pero si por algo destaca el utilitario de Kia es por lo fácil que es su manejo en ciudad: el tacto blando de los pedales y del propio cambio, y su excelente visibilidad, favorece su tránsito urbano.
Construido sobre un bastidor de acero reforzado de alta resistencia, el Kia Rio se nutre de los sistemas de asistencia a la conducción de la marca englobados en la tecnología Advanced Driver Assistance Systems, ADAS. De ésta nace como gran primicia en el segmento B, el sistema de frenada de emergencia automática con reconocimiento de peatones. También incluye el asistente de mantenimiento de carril.
Gama y precios Kia rio 2017:
Gasolina
Kia Rio 1.2 CVVT 84 CV Concept 14.600 €
Kia Rio 1.2 CVVT 84 CV Drive 16.500 €
Kia Rio 1.2 CVVT 84 CV Tech 17.600 €
Kia Rio 1.0 T-GDI 100 CV Concept 16.175 €
Kia Rio 1.0 T-GDI 100 CV Drive 17.500 €
Kia Rio 1.0 T-GDI 100 CV Tech 18.600 €
Diésel
Kia Rio 1.4 CRDi 77 CV Concept 16.975 €
Kia Rio 1.4 CRDi 77 CV Drive 18.300 €
Kia Rio 1.4 CRDi 90 CV Concept 17.475 €
Kia Rio 1.4 CRDi 90 CV Drive 18.800 €
Kia Rio 1.4 CRDi 90 CV Tech 19.900 €
*En la oferta de lanzamiento se aplica a estos precios un descuento de 2.300 euros, más otros 750 si se financia.