Las recetas de Nissan para impulsar el coche eléctrico
La marca japonesa Nissan celebra por tercer año consecutivo en Madrid el Foro de la Movilidad poniendo en escena su ya histórica defensa del coche eléctrico. Su director general y consejero delegado para España y Portugal, Marco Toro, se mira en el espejo de Noruega y su envidiable cuota de 18,7% de vehículos eléctricos, una meta que considera al alcance de España siempre que se den una serie de circunstancias en los próximos años.
Toro no fue el único que abogó por medidas concretas que animen a adquirir un coche de estas características. Mario Armero, subdirector ejecutivo de la patronal de fabricantes Anfac, se sumó a su petición de que se reduzca o se suprima el IVA en la compra de coches eléctricos, y solicitó también que se haga lo propio con el Impuesto de Circulación.
El máximo responsable de Nissan Iberia confía en que la cuota potencial de vehículos eléctricos en nuestro país alcance el 2% en 2018 y el 3,7% al año siguiente. Para 2020 espera un 8%, lo que supondría alrededor de 120.000 unidades, y en 2025 se llegaría al soñado 18% que nos igualaría a las cifras actuales de Noruega, donde ya se han aplicado los incentivos (incluida la supresión del IVA) que aquí se echan en falta.
¿Qué debe hacerse para lograr esos objetivos? Marco Toro aboga por una mayor estabilidad de las ayudas económicas tanto para la compra como para el uso, con planes de subvenciones que incluyan un plazo mínimo de cuatro años, que son las usuales en la mayoría de los países de Europa.
La desaparición del IVA tiene la gran virtud, según el directivo, de constituir justamente una medida estable que cuenta ya con el respaldo de la Unión Europea y que permitiría a los clientes “beneficiarse de un importante ahorro en fiscalidad” sin necesidad de poner en marcha planes de incentivo dotados de un presupuesto “que puede acabarse en un par de semanas, como ha ocurrido en España”.
Junto a estas iniciativas, Toro pide a las administraciones un mayor compromiso en la instalación de puntos de recarga (solo 4.300 en todo el país) y la posibilidad de utilizar la tecnología de carga bidireccional o Vehicle-to-Grid, con la que se devuelve a la red la energía sobrante del vehículo (cobrando por ello hasta 150 euros al mes en Noruega).
También reclama al Gobierno que acabe con las gestiones y costes que acarrea constituirse como gestores de carga a aquellas empresas del sector terciario, léase hoteles y grandes superficies, que deciden ofrecer a sus clientes la recarga sin coste de sus vehículos eléctricos.
Para subrayar lo que Nissan puede hacer por sí sola por la movilidad sostenible, el Foro sirvió ayer para presentar la cuarta generación del modelo eléctrico más emblemático de la marca, el Leaf, que alcanza ahora una autonomía teórica cercana a los 400 kilómetros.
La movilidad eléctrica se desarrolla, para Nissan, en paralelo a la conducción autónoma o semiautónoma. De ahí que el Leaf equipe ahora un sistema que permite seguir al vehículo precedente sin abandonar el carril y otro de aparcamiento automático, además del llamado e-Pedal, tecnología gracias a la que el coche acelera y frena mediante un solo pedal, al estilo de una máquina de coser.