Desde Docentes Unidos no sabemos si el Partido Popular se dio cuenta de que la nueva consejera no pretendía volver a Atapuerca, aunque quizás sí quería darse un paseo por la España medieval. Creemos que el peligro que Mabel representa va más allá de la política regional y pensamos que desde la capital del reino le han dado un toque a su presidente regional para que maneje con cuidado los preceptos de la extrema derecha, por lo que pueda ocurrir en las elecciones del próximo mes de mayo, ya que no pasa desapercibido que Murcia es el Guernica de Madrid. Las bombas caen primero en la huerta para ver el efecto que podrían tener en la Gran Vía madrileña.
Quizás Mabel no se haya dado cuenta, pero es posible que su papel en este sainete no sea el de consejera de Educación por mérito propio, sino que viene a sostener exclusivamente un gobierno endeble que no es capaz de gestionar sus políticas internas con dignidad.
En la carta, sus 'líneas maestras' estaban llenas de ideología, pero vacías de contenido: ¿Dónde están las alusiones a los temas que verdaderamente preocupan a la comunidad educativa? Nos referimos al acuerdo de personal docente interino, oposiciones de secundaria y otros cuerpos, plan estratégico de FP, plan de igualdad, modificaciones autonómicas del RD de acceso a la función pública, la ausencia de protocolos para las oposiciones del presente año, la coincidencia de la segunda dosis de la vacuna de los docentes con estos procesos selectivos o la posibilidad de que la EBAU coincida con las oposiciones y todo esto con la cuarta ola que está por venir. ¿Dónde están los protocolos sanitarios para todos los escenarios posibles? ¿Por qué no están esos temas tan importantes en sus 'líneas maestras'? Simplemente no aparecen porque Mabel no solo es una consejera ilegítima sino porque no está capacitada para ese cargo y no sabe cuáles son las prioridades y obligaciones de una consejería tan sensible como la suya.
Por otro lado, López Miras cree que con esconder de momento el pin parental y el cheque escolar las aguas volverán a su cauce. Sin embargo, nada dice de bajar ratios ni de reforzar la plantilla de profesores, pese a haber informado del aumento de inversión en educación pública. Si no piensa implantar las medidas que los profesionales le estamos exigiendo desde mucho antes de la pandemia y revertir los recortes que nos ahogan desde el año 2012, ¿en qué piensa, pues, utilizarlo? Si pretende comprar más ordenadores de saldo le pedimos que, por favor, no lo haga.
En esta línea de exigencias a la clase política para dignificar la escuela pública y dotar a los centros de todo aquello que necesitan, desde Docentes Unidos también tenemos unas palabras para el Gobierno de España: no puede seguir mirando hacia otro lado mientras en Murcia y en otras comunidades autónomas se gastan los fondos COVID (que iban dirigidos a paliar los problemas en educación) en pagar deudas de los gobiernos regionales. El PSOE de la Región de Murcia debe sumarse a la presión al gobierno estatal para que las partidas de gasto dirigidas a educación sean finalistas y se inviertan únicamente en la escuela pública. No nos podemos permitir un Ministerio de Educación débil que no sea capaz de enfrentarse a las comunidades autónomas austericidas. En particular, en la Región de Murcia hay problemas gravísimos de abandono escolar y una absoluta ausencia de excelencia educativa, estos problemas solo se pueden paliar con unos fondos destinados íntegramente a las necesidades reales de la red pública. Del mismo modo, la LOMLOE tampoco impone la bajada de ratios ni la reversión de los recortes en lo referido a las horas lectivas. Por tanto, creemos que tampoco ha cumplido con su obligación en este aspecto.
La nueva consejera debe saber que el funcionariado existe para que haya un cuerpo de trabajadores que no pueda ser manipulado y para que los servicios funcionen independientemente del signo político del gobierno de turno. Nosotros, tanto funcionarios de carrera como interinos, somos los encargados de proteger la educación: somos los garantes de la ley, de obedecerla y de hacerla cumplir, sea quien sea el consejero o la consejera del momento. Por ello, instamos a Mabel a ponerse al día en la legislación educativa vigente antes de lanzar promesas electoralistas que no tienen asidero legal y que quedan totalmente fuera de la realidad jurídica y de la propia Constitución. La tan mentada libertad de la que ella hace bandera no consiste en decir lo que a ella le apetezca en cualquier momento, máxime cuando uno ocupa un cargo público y de responsabilidad.
Finalmente, Mabel acaba sus 'líneas maestras' con un alarde de honestidad reafirmándose en su lucha desde su particular independencia, pues, según ella misma dice, hay precios que no se pueden pagar si uno quiere respetarse a sí mismo. Nos parece paradójica esta afirmación, ya que está claro que ella sí tenía un precio: la Consejería de Educación y Cultura.
0