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Colectivos sociales ponen tareas (y piden compromisos) al nuevo Gobierno Foral

Barkos atiende a los medios de comunicación / Foto: Efe.

Garikoitz Montañés

“Las prioridades están en el terreno de lo social, en lo económico y el empleo”. La candidata de Geroa Bai a la Presidencia del Gobierno Foral, Uxue Barkos, ha repetido este miércoles un mensaje que ha caracterizado a muchas de sus intervenciones antes y después de las elecciones: la necesidad de que un cambio de gobierno suponga un cambio en las prioridades, en lo que se ha promocionado como una vuelta a la política centrada en las personas. Esta vez, no obstante, Barkos ha utilizado el mensaje para responder a las dudas que ha generado la posibilidad de cambiar el modelo de los premios Príncipe de Viana, como ha sugerido Izquierda-Ezkerra (para evitar que estén ligados a la monarquía) y que UPN no ha tardado en aprovechar para recordar, una vez más, que Navarra es una parte esencial de España.

Este cruce de declaraciones deja de fondo una cuestión que las organizaciones sociales y sindicales han puesto en primera línea del debate durante la pasada legislatura: la necesidad de revertir los recortes en materias como la sanidad, de potenciar la educación pública, de frenar la precariedad laboral. Estos grandes objetivos riegan el terreno donde parecen encontrarse los intereses de Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e Izquierda-Ezkerra, porque ahí han centrado sus mensajes electorales. No obstante, para no olvidarlos, diversos colectivos ya han exigido a quien encabece el próximo Gobierno Foral que actúe en estos ámbitos; el (pen)último, hasta ahora, ha sido la Red Navarra de Lucha contra la Pobreza, al exigir una reforma fiscal que corrija las desigualdades, entre otras medidas. Esos colectivos han coincidido, al marcar los deberes al próximo Ejecutivo, en que esas reivindicaciones son las mismas independientemente del color del próximo equipo de gobierno, aunque tampoco han ocultado su expectación ante un gobierno de cambio que ha prometido precisamente eso, cambios. Esta es la hoja de ruta principal que ya han marcado diversas entidades.

La cooperación, hacia el 0,7

La Coordinadora de ONGD, en colaboración con Oxfam Intermón, ya evaluó durante la campaña el contenido sobre cooperación de los partidos políticos que se presentaban a las elecciones forales, y el resultado fue dispar: prácticamente la mitad suspendieron y la otra mitad aprobó. Formaciones como EH Bildu e I-E, inmersas en las conversaciones para conformar un gobierno alternativo a UPN, incluso rozaron el notable, pero otras como Geroa Bai y Podemos suspendieron. Ahora, la entidad ha vuelto a la carga y ha pedido una batería de medidas para recuperar los proyectos en cooperación para el desarrollo, cuyos fondos se han reducido, denunciaron, un 80% desde 2011. El objetivo primordial es tender al 0,7 y lograr al final de la legislatura destinar el 0,5% del presupuesto foral a este fin.

¿Se puede dilatar la LOMCE?

Colectivos como Sortzen o Herrikoa ya denunciaron durante la pasada legislatura deficiencias en las infraestructuras de los colegios públicos y, ahora, insisten en que no se han solucionado. El portavoz de Sortzen en Navarra (que agrupa a plantilla, alumnado y padres y madres de la escuela pública en euskera), Garikoitz Torregrosa, también ha pedido que se den nuevos pasos en la aplicación de la nueva Ley del Vascuence, que convierte la zona no vascófona en mixta y permite ofrecer modelo D allí donde haya demanda suficiente. Además, también ha habido movilizaciones contra las pruebas de la LOMCE, y hay expectación en torno a si un cambio de gobierno puede dilatar los plazos de aplicación de esta ley educativa.

Las cocinas, el plato fuerte

El sindicato LAB, vencedor de las recientes elecciones de la Administración Foral, ha planteado proyectos concretos en Sanidad en los que considera que hay que dar marcha atrás: por ejemplo, revertir la gestión de las cocinas del Complejo Hospitalario de Navarra (ahora en manos de la empresa Mediterránea de Catering), revisar la unificación del laboratorio y frenar el desvío de analíticas de zonas como la Ribera hasta Pamplona, valorar que se abran de nuevo las Urgencias de Virgen del Camino aunque se mantenga la unificación del servicio o recuperar plazas de empleo público.

Los sindicatos y la CEN, dos visiones distintas

Uxue Barkos siempre ha remarcado que la recuperación económica y el empleo encabezarán las actuaciones del Gobierno Foral si consigue liderarlo. De ahí que sus reuniones con los sindicatos y la Confederación de Empresarios (CEN) hayan generado expectación, especialmente después de que el presidente de la CEN, José Antonio Sarría, ya haya mostrado su “preocupación” por los resultados electorales. En ese cara a cara, celebrado el pasado martes, Barkos ha reiterado su compromiso con la creación y consolidación de empleo de “calidad”; y la CEN, por su parte, ha manifestado su “profundo temor” a un gobierno en el que participen EH Bildu y Podemos. A diferencia de estas tensas declaraciones de la patronal, en los encuentros con los sindicatos (como ELA, CCOO, UGT o LAB) sí se han coincidido en las conclusiones: por ejemplo, la necesidad de centrar la mirada en las políticas sociales.

“Rescatar a las personas”

Entre un 4 y un 5% de la población navarra, según calculan los expertos que han participado en la elaboración del último informe Foessa, está afectada por la pobreza severa. Estos datos, anunciados esta semana por Cáritas, han puesto el foco sobre la bolsa de pobreza y exclusión que parece cronificada en Navarra, una situación que, según apuntan desde la Universidad Pública de Navarra, es completamente nueva en la comunidad. En ese mismo informe, ya se solicita al futuro Gobierno un cambio de política de forma integral, dar estabilidad a la Renta Básica (habla así de la actual RIS), apostar por una política fiscal progresiva o recuperar la financiación destinada a la cooperación internacional. Este miércoles, la Red Navarra de Lucha contra la Pobreza, que agrupa a 27 organizaciones sociales, se ha pronunciado en la misma línea. Y ha recordado al futuro Ejecutivo Foral que la agenda social debería ser el centro de las políticas de gobierno: “Es necesario rescatar a las personas, porque ya no aguantan más”.

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