La Diputación de Álava flexibiliza las visitas en residencias para mayores con demencias

La Diputación Foral de Álava ha flexibilizado los requisitos para las visitas a personas mayores con demencias y gran necesidad de apoyo emocional que residen en residencias del territorio. Además, el Gobierno foral recuperará la dinámica “normalizada” de nuevos ingresos en estos centros, siempre con un aislamiento preventivo de 14 días.

Esta medida, adoptada por el departamento foral de Políticas Sociales, coincide con la entrada de Euskadi en la 'fase 2' del proceso de desescalada de las restricciones impuestas en el marco del estado de alarma por el coronavirus, según ha informado este lunes la Diputación en un comunicado.

De esa forma, y “en la medida en que los centros que estén preparados para ello”, se permitirán las visitas en residencias a las personas mayores que presentan demencias y cuya situación cognitiva les impida comprender la situación o utilizar el teléfono o las videollamadas para contactar con sus allegados.

Asimismo, se permiten a partir de este lunes las visitas cuando los mayores sufran situación psicoemocionales y los equipos profesionales de los centros consideren que su bienestar puede mejorar si se evita el aislamiento social. En estos supuestos, las visitas se realizarán con cita previa, y siempre que el allegado o familiar no tenga síntomas de la enfermedad.

Durante el tiempo en el que permanezcan en el centro, los visitantes no podrán mantener contacto físico con los residentes, con los que deberán guardar una distancia de seguridad de dos metros. Las visitas se efectuarán en un espacio habilitado al efecto por tiempo limitado a un máximo de una hora, y se recomienda que sea la misma persona la que acuda al centro en cada ocasión.

NUEVOS INGRESOS

Con el inicio hoy de la 'fase dos' de la desescalada, está previsto que se retome, asimismo, la dinámica normalizada de nuevos ingresos en las residencias para personas mayores, siempre con un aislamiento de inicio preventivo de 14 días. Estas nuevas medidas de flexibilización se suman a las ya adoptadas en las últimas semanas de manera progresiva en las residencias para mayores, con las que se ha tratado de aliviar el aislamiento social de los residentes, “siempre con la premisa básica de la prudencia y la seguridad”.

El pasado 13 de marzo se reanudaron las visitas de familiares en situaciones de cuidados al final de la vida, en las que se proporciona la posibilidad de mantener el contacto con la persona residente que se encuentre en situación terminal. Además, el 11 de mayo se dio un paso más, con la salida de residentes que no tienen coronavirus a los jardines de las propias residencias, con el objetivo de que puedan ver y saludar a sus familiares, que se tienen que mantener siempre fuera del recinto.

VUELTA A LA ACTIVIDAD

A partir del día 18, se ha reiniciado la actividad de los servicios de peluquería y de podología en los centros. Asimismo, a partir de esa fecha, las residencias, de forma progresiva, están retomando los servicios de musicoterapia, psicoestimulación y rehabilitación que presta personal, así como la utilización de los espacios comunes, para ir logrando de forma paulatina normalizar el funcionamiento de los centros.

Por otra parte, se ha reiniciado la actividad en dos centros de día para personas mayores, con el fin de atender los casos más urgentes. Para la 'fase 3' de la desescalada está prevista la vuelta de las visitas “más normalizadas” de familiares en las residencias para mayores, bajo condiciones estrictas de prevención y seguridad, y siempre en función de la evolución de la pandemia.

DISCAPACIDAD

En el resto de colectivos atendidos, este lunes se reinician a las visita de familiares en las residencias y viviendas para personas con discapacidad, aunque con condiciones “muy estrictas” y en aquellas viviendas o centros en los que se den las condiciones necesarias para garantizar las medidas de seguridad. También se han retomado las salidas de usuarios de forma individual.

Por otra parte, se han reiniciado las valoraciones pendientes del Servicio de Atención Temprana para niños que presentan trastornos en su desarrollo o tienen riesgo de padecerlos, mediante soporte a distancia, informes médicos y videollamadas.

En materia de atención a menores en situación de desprotección, se reanudan a partir de este lunes las intervenciones en domicilios familiares y las visitas. También se retoman las actividades grupales con atención limitada a una tercera parte de lo habitual. A su vez, se recupera desde la atención presencial en todos los programas del servicio foral de atención a mujeres víctimas de violencia de género.